Atenas, 9 oct (EFE).- Unos 30.000 griegos han acudido a una manifestación convocada hoy contra la visita de la canciller alemana Angela Merkel y las medidas de austeridad que los socios europeos exigen al gobierno del conservador Andonis Samarás a cambio de más ayuda financiera, informaron fuentes policiales.
Los principales sindicatos del país, GSEE y ADEDY, habían llamado a asistir masivamente a esta manifestación, y a participar en un paro laboral de tres horas, a pesar de que la Policía ha cerrado la mayoría de accesos al centro y restringido el derecho de reunión en numerosas avenidas por razones de seguridad.
Más de 6.000 agentes custodian el centro capitalino, y a pesar de esas medidas de seguridad "sin precedentes", según las definieron los medios griegos, los manifestantes poblaron la simbólica Plaza Syntagma frente al Parlamento griego en un ambiente festivo aunque muchos mostraban su rabia por la situación actual del país.
Muchos portaban pancartas con duros mensajes hacia la canciller alemana, como: "La presencia de Merkel es una provocación al pueblo" o "Fuera Merkel, abajo la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional)".
"Merkel tiene que entender que a los griegos, igual que a los españoles y los portugueses, se les debe permitir vivir", se quejó en declaraciones a Efe el pequeño empresario Grigoris Malamis, que asistió a la protesta junto a su mujer.
"Los impuestos y los precios se han incrementado. La gente ya no tiene dinero y la situación es por eso muy mala, pues nadie compra. Y creo que irá a peor", añadió.
Un grupo de manifestantes prendió fuego a una bandera alemana, pero más allá de eso, hasta las 11.30 GMT no se habían producido incidentes de gravedad.
No obstante, la policía utilizó gases lacrimógenos para reprimir a un grupo de empleados de hospital que pretendían bloquear una de las avenidas por las que tenía previsto transitar el cortejo de Merkel.
Según el canal estatal NET, los agentes también retuvieron a unas 40 personas para realizarles controles preventivos.
"Los griegos no se convertirán en un títere de esta crisis", alertó Alexis Tsipras, líder del principal partido de la oposición, la izquierda radical de Syriza, a su llegada a la manifestación junto al presidente del partido alemán "Die Linke" (La Izquierda), Bernd Riexinger.
"Merkel viene a Atenas a ver a sus súbditos. Si quisiese saber lo que pasa realmente en el país se reuniría con los representantes de la sociedad civil. Sólo viene a dar órdenes", denunció en declaraciones a Efe el diputado de Syriza y héroe de la Resistencia, Manolis Glezos. EFE