Madrid, 21 sep (.).- La mayoría de las empresas de refino y marketing no están bien posicionadas para la transición a un futuro con bajas emisiones de carbono, según un informe del servicio de inversores de Moody's, que se ha hecho público este lunes.
De las 24 empresas de refino que califica Moody's, casi dos tercios tienen una puntuación moderada en las evaluaciones de transición a una economía baja en carbono que ha hecho la agencia y sólo nueve tienen un posicionamiento sólido.
Según James Leaton, vicepresidente senior de Moody's, las refinerías ubicadas en mercados en crecimiento, con refinerías de mayor complejidad, han incorporado flexibilidad para mitigar parte del riesgo que enfrentan.
El informe dice que la intensidad energética tiende a ser más alta en América, debido al procesamiento de crudos pesados disponibles en la región, mientras que el riesgo político (que incluye el entorno regulatorio) es mayor en Europa y algunos estados de los Estados Unidos.
Algunas refinerías estadounidenses y europeas tienen márgenes más débiles, por debajo de 4 dó, lo que reduce la resistencia al debilitamiento de la demanda y los precios.
La mitad de las refinerías calificadas por Moody's han desarrollado una exposición fuerte o moderada a los productos petroquímicos, lo que reduce el riesgo frente a la transición a la descarbonización, aunque la oposición a la contaminación marina causada por los plásticos de un sólo uso puede moderar su crecimiento futuro.
En la categoría de resiliencia a largo plazo, solo siete empresas tienen un fuerte posicionamiento en el escenario de transición rápida a una economía baja en carbono.
Los operadores en India corren al menos el riesgo de tener que cerrar sus refinerías, mientras que en Europa el exceso de capacidad existente sólo empeorará si la demanda cae, dejando a los operadores con la opción de cerrar activos u operar plantas no económicas.
Para evaluar la posición de las empresas de refino que califica de cara a la descarbonización, Moody's ha tenido en cuenta su negocio actual, el riesgo político (que incluye el entorno regulatorio), la respuesta a medio plazo y su resiliencia a largo plazo.
El segmento de refino de las empresas petroleras integradas se puntuará junto con sus actividades de exploración y producción, ha indicado Moody's.