El análisis del martes de ING apunta a la próxima reunión del Banco de Inglaterra (BoE) como un evento significativo para la libra esterlina (GBP), con expectativas de negociación dentro de un rango de 0,8550-0,8600 frente al euro (EUR). Los analistas de la firma sugieren que podría haber riesgos al alza para la libra esterlina si la comunicación del Banco de Inglaterra se inclina hacia una postura pesimista.
El sentimiento actual del mercado se ve atenuado por los recientes comentarios del Economista Jefe del Banco de Inglaterra, Huw Pill, que han reducido las expectativas de un cambio importante en la cautelosa postura política del banco. La opinión principal de ING es que el anuncio de un recorte de tipos por parte del Banco de Inglaterra podría ser prematuro en la reunión del jueves, siendo más probable que se produzca un ajuste en agosto que en junio, según el economista británico de ING James Smith.
A pesar de que el mercado valora en un 30% la posibilidad de un recorte de tipos en junio, los analistas de ING creen que la libra esterlina no necesita subir significativamente si el BoE mantiene su lenguaje actual. También anticipan que los inversores podrían empezar a explorar operaciones de valor relativo con la GBP, en particular posiciones cortas frente al dólar australiano (AUD), debido a la persistente inflación en Australia y la brecha de producción positiva del país.
En resumen, las perspectivas de ING para la libra antes de la reunión del Banco de Inglaterra son prudentes. La firma espera que la divisa cotice en un rango estrecho frente al euro, con un potencial alcista si el Banco de Inglaterra sorprende con un sesgo pesimista. Los analistas también destacan la posibilidad de realizar operaciones de valor relativo con la libra esterlina en el contexto de las tendencias de la inflación mundial y los indicadores económicos.
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