El miércoles, Baird mantuvo una calificación neutral sobre Bank of America (NYSE:BAC), pero aumentó el precio objetivo a 40 $ desde los 38 $ anteriores. Este ajuste se produce después de que el banco comunicara unos beneficios por acción (BPA) en el segundo trimestre de 0,90 $, superando la estimación de consenso de 0,80 $ y la expectativa de Baird de 0,79 $.
Los resultados trimestrales de la entidad financiera superaron las previsiones, con unos ingresos netos básicos antes de provisiones (PPNR) de aproximadamente 9.230 millones de dólares, por encima de los 8.940 millones previstos. Este éxito se atribuyó a la solidez de los ingresos por comisiones.
Además, el trimestre incluyó aproximadamente 25 millones de dólares en liberaciones de reservas y pérdidas netas insignificantes por ajustes de valoración de derivados (DVA) de aproximadamente 1 millón de dólares.
Las declaraciones prospectivas de Bank of America sugieren un posible aumento modesto de los ingresos netos por intereses en comparación con las estimaciones de consenso, impulsado por las mejoras en los ingresos netos por intereses y las comisiones. El banco también indicó que podrían obtenerse mayores ganancias en función del crecimiento de los préstamos y depósitos.
Los recientes resultados financieros del banco se consideraron sólidos, y se señaló como aspecto positivo una mejora en la evolución de la morosidad de las tarjetas. A pesar de los resultados y las perspectivas favorables, la postura de Baird sigue siendo neutral, y las acciones del banco cotizan a aproximadamente 1,75 veces su valor contable tangible (TBV).
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