Por Josh Smith y Joori Roh
SEÚL (Reuters) - El líder Kim Jong-un ordenó al ejército de Corea del Norte que estabilice la distribución de medicamentos contra el COVID-19 en la capital, Pionyang, en la lucha contra el primer brote confirmado de la enfermedad en el país, según los medios de comunicación estatales.
La semana pasada, el Norte reconoció por primera vez la existencia de un brote "explosivo" y los expertos advirtieron de que podría causar estragos en un país con suministros médicos limitados y sin un programa de vacunas.
Los medicamentos adquiridos por el Estado no estaban llegando a la gente de manera oportuna y precisa, dijo Kim en una reunión de emergencia del politburó el domingo, antes de visitar las farmacias cerca del río Taedong de la capital, dijo la agencia estatal de noticias KCNA.
Kim ordenó el despliegue inmediato de las "poderosas fuerzas" del cuerpo médico del ejército para "estabilizar el suministro de medicamentos en la ciudad de Pionyang", añadió.
Aunque las autoridades habían ordenado la distribución de las reservas nacionales de medicamentos, las farmacias no estaban bien equipadas para realizar sus funciones sin problemas, añadió Kim, según la agencia.
Entre sus deficiencias se encontraba la falta de un almacenamiento adecuado de los medicamentos, aparte de las vitrinas, mientras que los vendedores no estaban equipados con la ropa sanitaria adecuada y la higiene de su entorno no cumplía las normas, dijo el dirigente.
Criticó la actitud de trabajo, la organización y la ejecución "irresponsables" del gabinete y del sector de la sanidad pública, añadió.
La vecina Corea del Sur no escatimará esfuerzos para ayudar al Norte a luchar contra su brote, dijo el lunes el presidente Yoon Suk-yeol al Parlamento, afirmando que está dispuesta a proporcionar vacunas contra el COVID-19 y otro tipo de apoyo médico si Pionyang está de acuerdo.
El Ministerio de Unificación de Seúl, responsable de las relaciones entre los vecinos, dijo que pronto propondría un plan de apoyo al Norte.
El recuento de Corea del Norte sobre los enfermos de fiebre ascendía a 1.213.550, con 50 muertes hasta el domingo, después de que la KCNA informara de 392.920 casos más de fiebre y ocho muertes más. No dijo cuántos presuntos infectados habían dado positivo en la prueba de COVID-19.
El Norte ha culpado de un gran número de muertes a personas que fueron "descuidadas en la toma de medicamentos" debido a la falta de conocimiento sobre la variante ómicron del coronavirus y su correcto tratamiento.
(Información de Josh Smith y Joori Roh; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)