Las personas y empresas dedicadas a la minería de Bitcoin están aumentando sus inversiones tras la caída del valor de las criptomonedas. Están gastando grandes sumas de dinero en equipos avanzados de minería y están utilizando más electricidad que nunca. Este aumento de la actividad se debe en parte a los cambios previstos en el software de Bitcoin que podrían afectar a la cantidad de dinero que pueden ganar los mineros.
Desde febrero de 2023, una investigación de TheMinerMag, basada en información disponible al público, muestra que las 13 principales empresas mineras han invertido más de 1.000 millones de dólares en sofisticados dispositivos de minería. CleanSpark (NASDAQ:CLSK) y Riot Platforms (NASDAQ:RIOT) lideran estas inversiones, con gastos de aproximadamente 473 y 415 millones de dólares, respectivamente.
El objetivo de estas inversiones es mejorar la eficiencia de sus operaciones y garantizar el acceso a electricidad asequible. La minería de Bitcoin es un proceso que requiere mucha energía porque implica confirmar registros de transacciones en la blockchain para recibir Bitcoin como recompensa.
Al mismo tiempo, estas inversiones han provocado un aumento del consumo eléctrico de la industria. El mes pasado, la industria consumió la cifra récord de 19,6 gigavatios de energía, un aumento respecto a los 12,1 gigavatios del año anterior, según estimaciones de Coin Metrics. La cantidad de electricidad utilizada es suficiente para suministrar energía a unos 3,8 millones de hogares en Texas, donde se encuentran muchas explotaciones mineras.
Estas cifras han suscitado debates en diversas plataformas en línea. Bill Ackman, multimillonario estadounidense y gestor de un fondo de cobertura, ha expresado su opinión sobre este tema.
En un mensaje, Ackman sugirió un posible ciclo: un aumento de los precios del Bitcoin lleva a más minería y a un mayor consumo de energía, lo que a su vez eleva los costes energéticos, provocando un aumento de la inflación y una caída del valor del dólar. Esto, a su vez, aumenta la demanda de Bitcoin y de minería, lo que lleva a un consumo de energía aún mayor, y el ciclo se repite. Bromeó sobre la posibilidad de que el valor de Bitcoin se volviera extremadamente alto, los costes energéticos se dispararan y la economía fracasara, concluyendo que tal vez debería invertir en Bitcoin.
El reciente auge de las actividades de la criptoindustria se debe a un aumento significativo del precio del Bitcoin. Este aumento se ha visto alentado por el lanzamiento de fondos cotizados en bolsa de Bitcoin que pueden comprarse y venderse como acciones y la expectativa de un evento de reducción a la mitad de Bitcoin previsto para abril.
Tras un descenso del valor del 64% en 2022 debido a varias crisis en la industria de las criptodivisas, el precio del Bitcoin se ha multiplicado por cuatro.
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