Desde 2016, Argentina está inmersa en una guerra contra la inflación. Causada por múltiples factores, como la falta de confianza en el banco central o el exceso de gasto del gobierno, la depreciación del peso argentino ha afectado negativamente al poder adquisitivo de los ciudadanos.
Esto ha llevado al 37.3% de la población a estar bajo el umbral de pobreza, y ha dejado a muchos otros con sus ahorros desvanecidos en el aire. En este contexto, muchos argentinos han recurrido a Bitcoin (BTC) y a las criptomonedas como forma de protegerse contra la inflación del 60%, a pesar de que el mercado está en rojo desde hace varios meses y de que el banco central prohíbe a las instituciones financieras operar con activos digitales.
- Paraguay aprueba una ley para regular el minado y comercialización de criptomonedas