Naciones Unidas, 24 sep (EFE).- El jefe del Ejecutivo español,
José Luis Rodríguez Zapatero, y los presidentes de México, Felipe
Calderón, y Argentina, Cristina Fernández, propusieron hoy al G-20
la recapitalización del Banco Interamericano de Desarrollo (BID),
como se ha hecho con otras instituciones financieras.
Según informaron fuentes del Gobierno español, esta fue una de
las principales conclusiones de la reunión de hoy de los tres
mandatarios en la sede de Naciones Unidas en Nueva York para
coordinar sus posiciones en la cumbre del G-20 que comienza esta
tarde en Pittsburgh.
Los tres apostaron también por seguir trabajando de forma
conjunta para acabar con los paraísos fiscales y coincidieron en la
necesidad de continuar con los pasos dados para incrementar la
supervisión del sistema financiero internacional.
A su juicio, apuntaron las mismas fuentes, la situación ya no es
tan grave como cuando el G-20 se reunió en Washington y en Londres,
porque se ha alejado el riesgo de un "crack financiero"
internacional, pero las dificultades persisten y hay que reforzar
los controles del sistema.
En este contexto, Zapatero explicó a Calderón y a Fernández el
modelo de supervisión del Banco de España, que incluso tiene
inspectores instalados en cada institución bancaria con el objetivo
de garantizar la transparencia y el rigor.
Los tres presidentes respaldaron asimismo la reforma del Fondo
Monetario Internacional.
Zapatero aprovechó el encuentro para recordar a México y
Argentina la proximidad de la cumbre del clima de Copenhague, donde
se debe cerrar una cuerdo post-Kioto, y les advirtió de que "no se
puede fracasar", destacaron las fuentes del Gobierno español.
A su juicio, hay que hacer todos los esfuerzos para que la cumbre
sea un éxito.
Los compromisos adquiridos por la Unión Europea están a la
vanguardia en la lucha contra el cambio climático y es necesario que
el resto de países den también "un paso al frente".
A pesar de que se mantiene optimista respecto a las posibilidades
de éxito, coincidió con Calderón y Fernández en las dificultades
existentes para cerrar un acuerdo por las diferencias que persisten
sobre la reducción de emisiones contaminantes, el método de
monitorización y la financiación. EFE