Pekín, 9 ene (EFE).- Los precios de China subieron un 2 % al cierre de 2014, una cifra muy alejada del objetivo gubernamental del 3,5 % y que, además, supone que el gigante asiático registró el año pasado su menor inflación desde 2009, lo que puede abrir la puerta a nuevas medidas de estímulo como recortes de los tipos de interés.
Según los datos del índice de precios de consumo (IPC) publicados hoy por la Oficina Nacional de Estadísticas de China, los precios de la segunda economía crecieron en 2014 a un ritmo seis décimas menor que el de 2013, cuando la inflación fue del 2,6 %.
Sólo en diciembre, los precios de China subieron un 1,5 % respecto al mismo mes del año anterior, una décima más que en noviembre, cuando el país obtuvo su peor dato mensual de inflación del último lustro.
El repunte de la inflación en diciembre frenó la tendencia a la baja que la inflación registraba en China desde agosto, mes en el que los precios aumentaron un 2 %, para después quedarse en el 1,6 % en septiembre, mantenerse en esa cifra en octubre y descender al 1,4 % en noviembre.
Los precios de los productos no alimentarios, que representan dos tercios del cálculo del IPC, subieron un 0,8 % interanual, la cifra más baja en 56 meses, mientras que los precios alimentarios, que representan el tercio restante, subieron un 2,9 %, frente al 2,3 % de noviembre.
Los datos mensuales de inflación se mantuvieron a lo largo de 2014 alrededor del 2 % y oscilaron entre un máximo del 2,5 % interanual en enero y mayo y un mínimo del 1,4 % de noviembre.
El aumento del 2 % a cierre de 2014 representa el menor dato de inflación en un año desde 2009, cuando los precios del país asiático bajaron un 1,7 % y se quedan lejos del objetivo del crecimiento del 3,5 % fijado por el Gobierno chino.
China también publicó hoy el índice de precios de producción (IPP), que mide el desarrollo de los precios en el mercado mayorista, que en todo 2014 bajó un 1,9 %.
El IPP registró un descenso cinco décimas mayor que el de 2013, cuando disminuyó un 1,4 %, que se fue agravando a medida que avanzaba el año por la caída de los precios del petróleo.
La Oficina Nacional de Estadísticas china también divulgó el IPP de diciembre, que, con un descenso del 3,3 % respecto al mismo mes del año anterior, marcó su mayor bajada en dos años.
Con ese dato, los precios al productor suman ya 34 meses consecutivos de deflación, como consecuencia del descenso de los precios de las materias primas, sobre todo, del petróleo, y de la demanda, así como al exceso de capacidad de la industria.
La evolución de este indicador apunta a un descenso cada vez más acusado de los precios en el mercado mayorista, ya que en noviembre cayó un 2,7 %, en octubre un 2,2 %, en septiembre un 1,8 % y en agosto un 1,2 %.
El analista de la Oficina Nacional de Estadísticas de China, Yu Qiumei, explicó que esa caída se debe a los menores precios del petróleo y el gas natural y de los productores químicos, lo que contribuyó un 0,4 % al descenso del IPP en diciembre.
La publicación de estas estadísticas aporta nueva información al debate que mantienen los analistas sobre si las autoridades chinas deberían adoptar o no medidas de estímulo en los próximos meses para reactivar la economía.
A la espera de que se den a conocer los datos de crecimiento de la segunda economía del mundo y ante el temor a una hipotética entrada en deflación, se discute sobre una posible bajad (MADRID:POP)a de los tipos de interés.
A finales de noviembre, el Banco Popular (MADRID:POP) de China, banco central del país asiático, ya bajó los tipos de interés por primera vez en dos años.
La economía china creció un 7,3 % en el tercer trimestre del año, el menor dato trimestral desde 2009, con lo que en 2014 podría incumplir, por primera vez en 15 años, el objetivo del Gobierno, fijado en el 7,5 %.