Bruselas, 25 feb (EFE).- La Comisión Europea defendió hoy la
producción de energía a partir de biomasa, pero pidió a los países
de la Unión Europea que controlen el origen de la materia orgánica.
El Ejecutivo comunitario formuló una serie de recomendaciones a
los Veintisiete entre las que figura la de evitar el uso de biomasa
procedente de bosques y áreas que sirvan de sumideros de dióxido de
carbono (CO2) o sean valiosas por su biodiversidad.
"La biomasa es una de las fuentes más importantes para lograr
nuestros objetivos de energías renovables (que en 2020 el 20 por
ciento de la energía que consume la UE proceda de fuentes
renovables)", afirmó en un comunicado el comisario europeo de
Energía, Günther Oettinger.
"Ya contribuye a más de la mitad del consumo de energía renovable
en la UE", añadió.
Según Oettinger, las recomendaciones formuladas hoy por la CE a
los estados miembros tienen por objetivo fomentar un uso sostenible
de la biomasa y el biogas.
Bruselas prevé realizar una revisión en el plazo de 18 meses para
evaluar si su planteamiento necesita ser modificado e introducir
medidas comunes o estándares obligatorios.
El informe presentado hoy por la UE está acompañado de una
evaluación de impacto, según la cual imponer criterios obligatorios
supondría costes demasiado elevados, por lo que de momento, no
compensa proponer nuevas medidas al respecto.
En ausencia de medidas comunes, los países de la UE pueden optar
por establecer normas a escala nacional que garanticen un uso
sostenible de la biomasa basadas en las recomendaciones comunitarias
publicadas hoy.
La CE además de recomendar que los países controlen el origen de
la materia orgánica y eviten utilizar biomasa procedente de bosques,
les facilita un mecanismo de cálculo común de emisión de CO2, que
podría ser utilizado para medir el recorte que supone el uso de
biomasa en la producción de energía en comparación con fuentes
fósiles. EFE