Sídney (Australia), 28 jul (.).- El Gobierno de Australia revisó a la baja la perspectiva de crecimiento económico del país oceánico, de un 3,5 % al 3 %, entre julio de 2022 y junio de 2023, informó este jueves el ministro del Tesoro, Jim Chamlers.
"La economía crece pero también los retos (...), el panorama mundial es complejo y las perspectivas son confusas", dijo Chamlers en un discurso ante el Parlamento de Camberra.
En el mismo, consideró también que la expansión del Producto Interior Bruto (PIB) australiano será inferior, del 2 %, para el siguiente año fiscal (entre julio de 2023 y junio de 2024), medio punto porcentual menos que lo previsto anteriormente.
La ralentización del PIB australiano responde a factores externos como el impacto económico de la pandemia de covid-19, los problemas en las cadenas de suministro y la guerra en Ucrania, de acuerdo al discurso del ministro laborista retransmitido por la cadena pública ABC.
También se debe, dijo, a una caída en el consumo doméstico por la alta inflación, que subió un 6,1 % interanual entre julio de 2021 y junio de este año, así como por el incremento de los tipos de interés, que pasaron del 0,1 % en mayo, el mínimo histórico, a 1,35 % en julio.
Se prevé que la próxima semana se vuelvan a elevar los tipos de interés en 0,5 puntos porcentuales para combatir la inflación.
"Si no se trata, una inflación demasiado alta durante demasiado tiempo socava el nivel de vida y el empleo, y destroza las economías", dijo Chalmers.
Por otro lado, las exportaciones netas, especialmente de productos comestibles, también se han visto afectadas por las fuertes inundaciones que han afectado este año a la costa este del país, entre otros factores.
Chalmers detalló que el Gobierno del laborista Anthony Albanese, que ganó las elecciones generales de mayo pasado poniendo fin a nueve años de gestión de la coalición Liberal-Nacional, prevé que la inflación roce el 7,75 % para finales de año, en lugar del 4,25 % pronosticado antes de los comicios.