Pekín, 10 nov (.).- China cerró este domingo la séptima edición de su Exposición Internacional de Importaciones (CIIE), en la que se registró un aumento del 2 % interanual en el volumen de los "acuerdos intencionales" firmados.
El importe total de estos acuerdos que plasman la intención de llevar a cabo una transacción determinada alcanzó los 80.010 millones de dólares (74.621 millones de euros), informó la cadena estatal CCTV.
Los organizadores contaban con la participación en el evento de 3.500 empresas de 152 países, regiones y organizaciones internacionales.
Asimismo, se esperaba la presencia de 297 de las 500 mayores empresas del mundo según el listado elaborado por la revista estadounidense Fortune, lo que supone ocho más que en la anterior edición.
España estuvo representada con un total de 67 expositores, con especial presencia en los pabellones de productos alimentarios y agrícolas (con estands de Borges o de la patronal del porcino Interporc) y de bienes de consumo (Zara, Isdin...).
Según la base de datos de la CIIE, más de 160 participantes de países latinoamericanos, con Brasil (82) y Argentina (43) como grandes protagonistas, tomaron parte en el evento.
"Cada año, compañías de América Latina y el Caribe cruzan océanos para unirse a esta cita en la CIIE", señaló esta semana la portavoz del Ministerio de Exteriores Mao Ning en una rueda de prensa en la que resaltó la variedad de productos de la región, como las cerezas chilenas de alta montaña.
Mao explicó que productos como el "camarón blanco hondureño, el café, o la miel y el marisco de Nicaragua" han ganado popularidad entre los consumidores chinos.
Además, mencionó que la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile firmó acuerdos con plataformas de comercio electrónico en China, lo cual “facilita la llegada de estos productos a los consumidores chinos”.
El evento se celebró con el trasfondo de la incertidumbre económica del país asiático y coincidiendo asimismo con una importante reunión de los legisladores nacionales, que anunciaron este viernes que el plan para canjear la "deuda oculta" de los gobiernos locales y regionales del país y sanear así sus balances contables ascendería a un total de 10 billones de yuanes (1,4 billones de dólares, 1,3 billones de euros).
Así, junto con otros paquetes de medidas previos y diversos estímulos, Pekín pretende volver a dar impulso a una recuperación económica hasta ahora menos brillante de lo que se pronosticaba.
La CIIE se celebró por primera vez en 2018 y desde entonces ha mantenido su presencia anual en la ciudad oriental de Shanghái, aunque quedó lastrada en los años de la pandemia por la directriz china de 'cero covid', que dificultó enormemente la entrada en el país de representantes de compañías extranjeras.
Aunque algunas empresas ven la CIIE como una oportunidad para reforzar su presencia en China y para generar contactos con los importadores locales, que en algunos casos cristalizan en negocios pasado un tiempo, otras la consideran un evento simbólico y de carácter mayormente político.