Por Xiaoyi Shao y Sue-Lin Wong
PEKÍN (Reuters) - El comercio en China se frenó en diciembre, pero mucho menos de lo esperado, con un dato de exportaciones que superó a muchos de sus rivales regionales después de que el país permitiese al yuan depreciarse con fuerza, lo que desató el temor a una guerra de divisas en las economías de Asia dependientes del comercio.
"El dato comercial apoya nuestra opinión de que a pesar de las turbulencias en los mercados financieros chinos, no ha habido un gran deterioro en su economía en los últimos meses", dijo Daniel Martin, economista experto en Asia de Capital Economics, en una nota.
Las exportaciones del país que más comercia del mundo bajaron un 1,4 por ciento interanual, según datos de la Administración General de Aduanas, mucho menos que la previsión de Reuters de una caída del 8 por ciento y moderándose desde la bajada del 6,8 por ciento de noviembre.
También superaron las exportaciones de países vecinos como Taiwán y Corea del Sur, dijeron analista, y se produjeron en plena debilidad de la demanda en el extranjero.
Las importaciones de diciembre bajaron un 7,6 por ciento, retrocediendo por décimo cuarto mes consecutivo, pero no tanto como se temía, posiblemente debido a que las fábricas se han abastecido de crudo, hierro y otras materias primas mientras los precios de las materias primas siguen bajando.