La Habana, 17 ene (.).- La inflación interanual oficial de Cuba se situó al cierre de 2024 en el 24,88 %, la tasa mensual más baja en años, informó este viernes la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI).
El dato mantiene la tendencia a la baja en el incremento de los precios en los últimos meses, aunque el índice de precios al consumo (IPC) sigue en niveles que, según los expertos, dañan a la economía en su conjunto, sobre todo a familias, trabajadores y pensionistas.
Pese a esta paulatina reducción, la inflación ha triplicado los precios en la isla desde 2020, según las estadísticas oficiales. El IPC cerró 2021 por encima del 77 %, mientras que en 2022 se situó en el 39,07 % y en 2023, en el 31,34 %.
Además, la percepción social en la isla es que la inflación es muy superior a las cifras oficiales, donde es difícil incluir de forma representativa el comportamiento de los precios en el extenso y no regulado mercado negro del país, más surtido y dinámico que el oficial.
La variación mensual del IPC con respecto a noviembre fue del 1,66 %, esto supone un ligero repunte frente al 1,41 % registrado el mes anterior, pero sensiblemente inferior que el 3,39 % de diciembre de 2023.
Por categorías, el mayor incremento interanual se produjo en Bebidas alcohólicas y tabaco (67,24 %), seguido por Restaurantes y hoteles (29,04 %), Alimentos y bebidas no alcohólicas (28,15 %), y Transporte (24,58 %).
Todas las divisiones experimentaron subidas interanuales por encima del 10 % salvo Recreación y Cultura (9,46 %), Salud (0,85 %) y Comunicaciones (0,67 %). En los dos últimos casos, se trata de monopolios estatales.
Cuba se encuentra sumida en una grave crisis económica y energética desde hace más de cuatro años, evidente en la escasez de básicos (alimentos, medicinas y combustible), una inflación galopante, una dolarización creciente y prolongados apagones diarios.
La combinación de la pandemia de la covid-19, el endurecimiento de las sanciones estadounidenses bajo la primera Administración de Donald Trump (2017-2021) y las fallidas políticas económicas y monetarias nacionales han agravado problemas estructurales de la economía cubana.
La situación ha provocado un gran descontento social, visible en las inusuales protestas de los últimos años y en una ola migratoria sin precedentes en escala y duración.