Bruselas, 3 mar (EFE).- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, afirmó hoy que varios países de la eurozona tienen que acometer "importantes reformas estructurales" para ver una disminución significativa del desempleo.
"A fin de ver una reducción significativa en el desempleo, no solo tiene que repuntar la actividad económica, sino que también se tendrán que acometer importantes reformas estructurales en varios Estados miembros", señaló el economista italiano ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Eurocámara.
Durante su intervención, el presidente del BCE afirmó que la eurozona se encuentra, en términos de fundamentos económicos e institucionales, mejor que hace cinco años y "está claramente moviéndose en la dirección adecuada".
"El vaso está, al menos, medio lleno", sostuvo, después de todos los esfuerzos de reforma y de consolidación llevados a cabo a nivel nacional, especialmente en los países bajo programa, y las reformas acometidas a nivel europeo.
No obstante, recalcó que "los desafíos que tenemos por delante son demasiado importantes y complejos como para caer en la complacencia; es demasiado pronto para clamar 'misión cumplida'", señaló en su última comparecencia ante la Comisión durante la actual legislatura de la Eurocámara.
Draghi se refirió a los ciudadanos que todavía sufren el "inevitable proceso de ajuste", tras años de desequilibrios acumulados y "al inaceptablemente alto desempleo".
En este sentido, los países miembros tienen que mantener sus promesas, corregir los desequilibrios y reformar la estructura de sus respectivas economías, dijo.
Además, las políticas presupuestarias deben alinearse con las provisiones del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) y el pacto presupuestario o fiscal, y la consolidación debe estar diseñada de una manera que no perjudique el crecimiento, mientras las reformas estructurales impulsarán el potencial económico.
"Ello afecta a todos los Estados miembros, no solo a aquellos que miraron en algún momento al abismo de perder el acceso a los mercados", afirmó Draghi, quien dijo que también se deben sentir aludidas las instituciones europeas, porque tienen que garantizar que las reglas comunes "sean aplicadas de manera estricta e igualitaria".
A nivel europeo también significa finalizar la unión bancaria mediante la rápida transposición de las directivas acordadas y la aplicación concienzuda del marco regulador.
Asimismo, debe acordarse "antes del fin de esta legislatura", es decir, en abril todavía, el mecanismo único de liquidación de la banca y llenar las lagunas que quedan en la arquitectura de la unión económica y monetaria para tener una eurozona verdadera e integral.
"Ello no significa impulsar la integración cuán lejos podamos, porque no es necesario económicamente ni políticamente realista", reconoció.
Pero sí implica alinear la gobernanza y las políticas económicas de los Estados miembros donde fuera necesario "para garantizar que efectos positivos de contagio sean reforzados y los negativos minimizados", y "compartir soberanía en áreas políticas claves es ciertamente una manera de lograrlo", explicó.
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