Madrid, 20 feb (.).- El 14,5 % de las 86.117 actuaciones inspectoras supervisadas por las autoridades competentes en materia de vigilancia de mercado de productos puestos a la venta en España en 2021 contenía irregularidades, según el informe anual publicado este lunes por la Asociación Española de Normalización (UNE).
Los principales motivos de las citadas irregularidades fueron la normalización y las condiciones de venta (56 %), seguido por otras infracciones (23 %), la adulteración y fraude en la calidad (8,2 %), los precios (7,9 %) y las transacciones comerciales (5,2 %).
Según la Dirección General de Consumo, el sistema de Red de Alerta gestionó 2.769 notificaciones, de las que 2.754 se debieron a productos encontrados en el mercado por las autoridades de control (572 de ellas por las comunidades autónomas), más 15 emitidas por la citada dirección.
Las categorías de productos más notificadas fueron los juguetes (22,51 %), seguido por los vehículos y accesorios (21,50 %), los productos eléctricos (9,88 %), los equipos de protección individual (8,46 %) y la moda de adultos y accesorios (7,92 %).
La mayoría de estos productos notificados (el 58 %) procedía del continente asiático.
El informe destaca, igualmente, la "inseguridad" de algunos productos adquiridos fuera de la UE a través de los mercados en línea ofrecidos por plataformas de venta o redes sociales y que reciben directamente los consumidores.
Al ser considerados estos medios como operadores económicos, el estudio no les atribuye "responsabilidad alguna" en la seguridad y salud de los consumidores por los productos que ayudan a poner en el mercado.
Con respecto al etiquetado energético, el estudio estima que en Europa el etiquetado energético supuso en 2021 un ahorro superior a los 120.000 millones de euros, si bien apunta que la cifra podría doblarse en 2022.
En España este ahorro fue aproximadamente de 12.000 millones en relación con el nuevo etiquetado, con única clase "A", que son los que tienen un menor consumo y por tanto son los más eficientes, mientras que los de la clase "G" son los de mayor consumo.
El informe ha sido elaborado en colaboración con más de 40 organizaciones empresariales españolas, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el Ministerio de Consumo y diferentes Autoridades con competencia en vigilancia de mercado.