Madrid, 18 ene (.).- El 45 % de los propietarios de turismo rural tiene previsto subir sus tarifas en este 2023 para responder a la subida constante de suministros necesarios para su actividad, especialmente el gasto eléctrico.
Así lo refleja el informe anual de Turismo rural del Observatorio que lidera la plataforma Escapadarural y que se ha hecho público este miércoles en la Feria Internacional de Turismo (Fitur), con los datos de 2022 y las perspectivas para este año.
La mayoría de los propietarios decidió en 2022 no repercutir dicha inflación en sus clientes para evitar un freno en la demanda.
El principal motivo que les lleva ahora a decidirse por este aumento de precios es la subida de los gastos, la luz y el gas, una razón que esgrimen casi ocho de cada diez encuestados.
El 13 % lo hará porque lleva años con las tarifas congeladas y ya "toca", el 5 % porque tiene como costumbre subir la proporción del IPC y el resto porque necesitan más ingresos, entre otras alternativas.
Para este año las perspectivas del segmento del turismo rural son optimistas, pues el 82 % de los usuarios participantes en este estudio asegura que tiene previsto mantener sus escapadas y con la misma frecuencia que este año.
Los destinos rurales favoritos son, por ahora y en función de los deseos expresados de los clientes, Asturias (33 %), Cantabria (25 %), Huesca (17 %) y Teruel (12 %).