Dublín, 4 abr (EFE).- El Banco Central Irlandés (ICB) rebajó hoy sus previsiones para la economía de Irlanda al estimar que el producto interior bruto (PIB) crecerá un 2 % en 2014, frente al 2,1 % precedente, mientras que mantuvo una expansión del 3,2 % para el siguiente año.
En su segundo análisis trimestral, el banco emisor irlandés aseguró, no obstante, que la mejoría constante que está experimentando la economía, unida a un descenso significativo del desempleo, son claros signos de una "recuperación sostenible".
En el primer informe del año, el ICB había indicado que el PIB irlandés crecería un 2,1 % en 2014 y un 3,2 % en 2015.
Respecto al producto nacional bruto (PNB), que a diferencia del PIB excluye las ganancias de las multinacionales y para algunos expertos es un indicador más fiable, el banco central predijo hoy que crecerá un 2,7 y un 2,6 % en 2014 y 2015, respectivamente.
La entidad también adelantó una "caída significativa" de la tasa de desempleo, que después de bajar al 13,1 % en 2013 podría situarse en el 11,3 % en 2014 y en el 10,4 % al año siguiente.
Tras superar el 15 % de desempleo a principios de 2012, el banco explicó que la rebaja del desempleo en un primera fase estuvo propiciada por la creación de puestos de trabajo a tiempo parcial, si bien ahora la mayoría es a tiempo completo.
"También se aprecian señales de mejoría en los datos sobre inversiones, negocios y el gasto del consumidor, como demuestran las cifras sobre el gasto en el sector del comercio minorista", indicó el informe.
Frente a las perspectivas positivas para los dos próximos años, el ICB dijo que los datos provisionales apuntan a que el PIB se contrajo un 0,3 % en 2013, mientras que el PNB creció un 3,4 %.
La caída del PIB, apuntó, pudo deberse a la ralentización de la economía experimentada al comienzo de ese año por la caída de las exportaciones, aunque no tuvo "un gran impacto" sobre el mercado laboral.
"La economía global se ha reforzado gracias, sobre todo, al crecimiento de las economías avanzadas", explicó el ICB, si bien advirtió de que el crecimiento en la zona euro continúa siendo "débil".
En su segundo análisis del año, el ICB recomendó mantener los objetivos de consolidación fiscal marcados en el rescate que pidió Irlanda en 2010 a la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 85.000 millones de euros, abandonado con éxito el pasado diciembre.
"Para asegurar que se mantiene la confianza, será más importante que nunca que el Gobierno trace planes presupuestarios para 2015 destinados a convencer a los observadores de que Irlanda se mantiene en el camino de la consolidación fiscal", agregó el banco.