Tokio, 29 mar (.).- El Banco de Japón (BoJ) estima que la inflación se acelerará en este país hasta cerca del 2 % durante el primer semestre del año debido al encarecimiento de las materias primas, según las minutas publicadas hoy de la última reunión de la entidad sobre política monetaria.
Los miembros de la junta de política monetaria del BoJ consideran que el índice de precios de consumo (IPC) de la tercera economía mundial experimentará una evolución alcista durante la primera mitad del año hasta aproximarse al objetivo de inflación interanual fijado por el banco central nipón, del 2 %.
El BoJ señala que esta será la evolución resultante del incremento generalizado de los precios de las materias primas que se venía observando desde el año pasado, así como del aumento del coste del petróleo y del gas en los mercados globales a raíz de la guerra de Rusia y Ucrania.
De confirmarse, este incremento del IPC en Japón entre enero y junio llegaría después de que el índice retrocediera un 0,2 % en 2021, lo que supuso su segunda contracción anual consecutiva.
Pese a que Japón ha registrado una evolución del IPC muy débil durante los últimos meses de 2021 y primeros de 2022 en comparación con los fuertes avances observados en Estados Unidos y en Europa, la tendencia global parece haber comenzado a mostrarse también en Japón.
El IPC subió un 0,6 % interanual en febrero en Japón, según los últimos datos disponibles, mientras que el BoJ prevé que a partir de abril "el IPC se incrementará claramente" y se sitúe "temporalmente alrededor del 2 %", según las minutas publicadas hoy por la entidad.
El BoJ también señala que las empresas han comenzado a elevar el precio de venta de sus productos en línea con el encarecimiento de las materias primas, rompiendo así la tradicional resistencia del sector privado nipón, que prefería asumir esa diferencia de costes antes que exponerse a perder el favor de los consumidores.
Esto se debe "a que las empresas pueden tener ahora más aceptación de los consumidores" a la hora de encarecer sus productos debido a la tendencia generalizada a subir los precios en diferentes sectores, según las opiniones de la junta de política monetaria del BoJ.
Pese a todos estos factores que influyen al alza sobre los precios, el BoJ también advierte de que pueden darse "nuevas presiones a la baja sobre la actividad económica o el coste de las materias primas", lo que conllevaría el riesgo de una nueva caída en la deflación para Japón.