Lisboa, 10 oct (.).- El Gobierno portugués del socialista António Costa presentó este martes unos presupuestos para 2024 que incluyen rebajas fiscales en el impuesto sobre la renta y para los jóvenes, aumentos para pensionistas y funcionarios y un refuerzo en la dotación de sectores como la sanidad pública.
El borrador de los presupuestos fue presentado este martes en rueda de prensa por el ministro luso de Finanzas, Fernando Medina, que defendió que es necesario reforzar los ingresos de las familias "por una cuestión de justicia" ante lo sufrido los dos últimos años, pero también para estabilizar la demanda interna y generar confianza.
Medina destacó que los resultados económicos de 2023 "superaron las expectativas", pero el año también estuvo marcado por factores que "perturbaron" a las familias, como la inflación y la brusca subida de los tipos de interés.
Reforzar los ingresos
Reforzar los ingresos es el "pilar central" del documento del Gobierno, que ya había anunciado un aumento del salario mínimo de 60 euros, hasta los 820, que beneficiará a cerca de un millón de trabajadores.
Los funcionarios tendrán una subida media del 5,4 % y los pensionistas del 6,2 %.
A ello se sumará una rebaja de las tasas del impuesto sobre el rendimiento de las personas individuales (IRS) para las "clases medias", dijo el ministro, del que se beneficiarán los ciudadanos que cobren hasta 1.938 euros brutos mensuales y que tendrá un coste para el Estado de 1.327 millones de euros.
El Ejecutivo también mejoró los beneficios fiscales para jóvenes en sus primeros cinco años de empleo (con exenciones de entre el 25 % y el 100 % del IRS), devolverá el coste de las matrículas universitarias durante los primeros años de trabajo y ofrecerá abono transporte gratuito para estudiantes hasta los 23 años.
En el presupuesto también están incluidas medidas ya anunciadas para apoyar las hipotecas, como la bonificación de los intereses y una moratoria en el euríbor, y la continuidad de programas de acceso a vivienda.
No hubo grandes anuncios para esta última, en un momento en el que Portugal vive una grave crisis de vivienda y tras la aprobación, este año, de un polémico paquete de medidas para atajarla que acaba de entrar en vigor.
Se ampliará la gratuidad de las guarderías hasta el tercer año y se reforzarán las prestaciones dirigidas a las familias vulnerables, como el abono por hijo o el complemento para ancianos.
El IVA cero que se aplica hasta finales de 2023 en una cesta de productos básicos, destinado a combatir la alta inflación, no se prorrogará a 2024.
Medina explicó que se ha optado por dirigir esas medidas a las familias más vulnerables y el impacto que tendría ese IVA cero se ha incluido en los aumentos de las prestaciones sociales.
Además, el documento confirma el fin del régimen especial para extranjeros que incluía beneficios fiscales para pensionistas y trabajadores de "alto valor añadido".
Más inversión, parte de fondos europeos
El presupuesto incluye un aumento de la inversión pública, que alcanzará los 9.200 millones (3 % del PIB), de los cuales 5.800 corresponderán a fondos europeos.
La dotación del Sistema Nacional de Salud (SNS) -que sufre una grave crisis por falta de recursos y personal, con urgencias cerradas y huelgas constantes- crecerá un 10 % respecto al año anterior, con 1.209 millones más, hasta rondar los 13.500 millones.
También crecerán los presupuestos para vivienda (336 millones más), educación (297 millones) y ciencia y tecnología (182 millones).
Habrá medidas para promover la inversión empresarial, como un refuerzo a los incentivos para la capitalización de empresas -con ventajas como reducciones fiscales-, a la investigación científica y la innovación y a la revalorización salarial.
La propuesta del Gobierno refuerza en 2.634 millones el fondo para las pensiones, que por primera vez incluirá financiación procedente del IRS, y crea otro fondo para promover inversiones "estructurantes" después de 2026, que arrancará con 2.000 millones.
El borrador fue entregado este martes en el Parlamento, donde seguirá su tramitación y se someterá a votación final el 29 de noviembre, con su aprobación asegurada gracias a la mayoría absoluta socialista.