La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha informado de una drástica contracción de la economía de Gaza, que ahora representa menos de un sexto de su tamaño en comparación con su estado antes del conflicto que comenzó hace casi un año. La economía de Gaza se describe como "en ruinas" tras 11 meses de campaña militar israelí en respuesta a los ataques de los militantes de Hamas el 7 de octubre.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) publicó un informe que destaca la grave recesión económica y la triplicación de las tasas de desempleo en Cisjordania ocupada. La Autoridad Palestina (AP), con un autogobierno limitado bajo la ocupación israelí en Cisjordania, se enfrenta a una "inmensa presión" que amenaza su capacidad operativa.
Pedro Manuel Moreno, Secretario General Adjunto de la UNCTAD, enfatizó la gravedad de la situación al declarar a los periodistas en Ginebra: "La economía palestina está en caída libre". Moreno instó a la comunidad internacional a intervenir para detener el declive económico, abordar la crisis humanitaria y establecer una base para la paz y el desarrollo sostenibles.
El informe también señala la disminución de la ayuda internacional y las deducciones de ingresos por parte de Israel como factores que agravan las dificultades financieras de los palestinos. Desde 2019, Israel ha retenido más de 1.400 millones de dólares, según las estimaciones de la UNCTAD.
Bezalel Smotrich, Ministro de Finanzas de Israel, justifica la retención de fondos acusando a la AP de apoyar los ataques del 7 de octubre, una afirmación que la AP niega. Israel también deduce los pagos realizados por la AP a las familias de militantes y civiles muertos por las fuerzas israelíes, denominados "pagos a mártires".
Cisjordania ha experimentado un "rápido y alarmante declive económico" y un aumento de la violencia desde la guerra de Gaza, según el informe. Se han perdido más de 300.000 empleos en Cisjordania, lo que ha provocado que la tasa de desempleo aumente del 12,9% al 32%. La UNCTAD atribuye este declive a los disturbios y a las nuevas restricciones comerciales impuestas por Israel, como los puestos de control.
La violencia en Cisjordania ha provocado más de 650 muertes palestinas desde el 7 de octubre, según la ONU. Israel, que no publica cifras de bajas palestinas, ha declarado que unos 40 israelíes han muerto en ataques de palestinos fuera de Gaza desde esa fecha. Israel defiende sus acciones en Cisjordania como necesarias para contrarrestar a los grupos militantes respaldados por Irán y proteger a los civiles israelíes.
El conflicto en cuestión se intensificó cuando Hamas atacó Israel el 7 de octubre, causando 1.200 muertes israelíes y aproximadamente 250 rehenes. En respuesta, el asalto de Israel a Gaza ha provocado más de 41.000 víctimas mortales palestinas, según el ministerio de salud del enclave.
Reuters contribuyó a este artículo.
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