Por Xiaoyi Shao y Kevin Yao
PEKÍN (Reuters) - El comportamiento comercial de China superó las expectativas en marzo, cuando las exportaciones volvieron a crecer por primera vez en nueve meses, lo que ofrece más señales de estabilización en la segunda mayor economía del mundo.
Las exportaciones treparon un 11,5 por ciento en marzo respecto al mismo mes del año previo, mostraron datos de aduanas el miércoles, el primer alza desde junio y el mayor aumento desde febrero del 2015, aunque los economistas advirtieron que unos efectos de base y factores estacionales tuvieron un rol en la cifra.
Datos y encuestas recientes de las actividades industriales y de servicios han insinuado una leve mejoría en la economía general, lo que parece estar transpasándose a los exportadores del país.
Las importaciones continuaron cayendo pero menos que lo esperado, disminuyendo un 7,6 por ciento en términos denominados en dólares, lideradas por fuertes correcciones en las importaciones de bienes extranjeros libres de impuestos, alquileres y equipos importados.
Sin embargo, los volúmenes de importación de la mayoría de las principales materias primas subieron.
Las cifras dejaron al país con un superávit comercial de 29.860 millones de dólares para el mes, mostraron los datos de la Administración General de Aduanas, frente a una previsión de 30.850 millones de dólares.
"Creo que el efecto de base fue un factor muy grande, ya que la base del año pasado fue baja", dijo Ma Xiaoping, analista de HSBC, y agregó que muchas cifras de exportación reportadas en marzo en realidad captan algunas órdenes de febrero debido a las fechas variables del Año Nuevo Lunar cada año.
"Creo que hay que centrarse en la tasa de crecimiento de las importaciones mejor que la esperada, lo que significa que la demanda interna también se está recuperando, impulsada por la inversión en infraestructura y también la recuperación del sector inmobiliario", agregó.
Economistas consultados por Reuters esperaban que las exportaciones de marzo subieran un 2,5 por ciento, tras desplomarse un 25,4 por ciento en febrero -su peor desempeño desde mayo de 2009- y pronosticaron que las importaciones bajarían un 10,2 por ciento, luego del retroceso de un 13,8 por ciento en febrero.