Fráncfort (Alemania), 28 oct (.).- Los principales mandatarios europeos despiden hoy en una ceremonia al presidente saliente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, que pasa el testigo a Christine Lagarde, la próxima presidenta de la entidad y la primera mujer en ocupar este cargo.
En el acto, que se va a celebrar en la sede del BCE a partir de las 14.00 horas GMT, participan el presidente saliente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker; la canciller alemana, Angela Merkel, y los presidentes de Francia, Emmanuel Macron, e Italia, Sergio Mattarella.
Draghi concluye el 31 de octubre su mandato de ocho años como presidente del BCE, un periodo en el que tuvo que hacer frente a la crisis de endeudamiento soberano de la zona del euro.
Durante estos ocho años Draghi ha recortado el precio del dinero en 150 puntos básicos, hasta el 0 %, que es el interés que cobra a los bancos en las operaciones de refinanciación semanales.
También ha bajado la tasa de interés a los depósitos bancarios en 125 puntos básicos, hasta dejarlo en el -0,5 %, por lo que el BCE cobra a los bancos por el exceso de reservas a un día.
Pero la medida más polémica que ha aprobado el BCE en estos ocho años fue comprar grandes cantidades de deuda pública y privada, sobre todo deuda soberana.
En total, el BCE ha adquirido deuda por valor de 2,6 billones de euros y, aunque en enero interrumpió las adquisiciones, a partir del 1 de noviembre las volverá a retomar a un rimo mensual de 20.000 millones de euros porque la eurozona se debilita más de lo que esperaban y la inflación no sube.
Draghi, conocido como "SuperMario", concluye su mandato sin haber subido los tipos de interés y habiendo sido el salvador del euro con un par de frases breves con las que frenó los ataques especulativos contra la divisa comunitaria.
"El BCE hará todo lo que sea necesario para salvar el euro. Y, créanme, será suficiente", dijo Draghi un discurso a finales julio de 2012 en Londres.
Draghi (Roma, 1947) también subrayaba la disposición de la entidad a mantener a todos los países dentro de la unión monetaria.
A cambio todos los países del sur de Europa han tenido que hacer unas reformas económicas durísimas.
Lagarde (París, 1956) ha sido considerada afín a los estímulos monetarios en época de crisis para estimular a la economía de la eurozona.
Pero recientemente ha dicho en una entrevista que quiere conocer las voces críticas con la política de bajos tipos de interés y que va a revisar profundamente todas las medidas que el BCE ha aprobado y analizar los beneficios y sus riesgos.