Atenas, 18 efe (EFE).- El primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, anunció hoy que aumentará las pensiones más bajas, la ayuda a los desfavorecidos y los salarios de los uniformados que menos cobran, tras haber alcanzado un acuerdo con la troika en este sentido.
Tras siete meses de negociaciones con los representantes de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, hoy se logró un acuerdo que permitirá el desembolso de los tramos del rescate correspondientes al último trimestre de 2013 y al primero de 2014.
Además, Samarás ha conseguido convencer a los acreedores de utilizar para beneficio de los más desfavorecidos parte del superávit primario -antes del pago de los intereses de la deuda- y que el Gobierno griego valora en cerca de 3.000 millones de euros al término del ejercicio de 2013.
El acuerdo firmado en 2012 entre Grecia y la troika contemplaba que el 30 % del superávit primario sería utilizado para el pago de la deuda, mientras que el resto lo podría repartir el Gobierno a su gusto.
Sin embargo, los representantes de la troika se habían negado a mantener estos porcentajes pues dudan de que la ejecución presupuestaria del presente año vaya a cumplir con el superávit primario establecido como objetivo por el programa de ajuste.
Finalmente, según anunció Samarás "más de 500 millones de euros serán distribuidos a un millón de personas que fueron los más afectado por la crisis".
El primer ministro heleno explicó que este monto beneficiará a "los pensionistas" con pensiones bajas y a "los uniformados (militares, policías, guardacostas...) con salarios inferiores a 1.500 euros mensuales".
Además, prometió dedicar 20 millones de euros en ayudas a los "sin techo", que según diversos cálculos son entre 20.000 y 40.000 personas en toda Grecia.
También se incrementarán las devoluciones de impuestos de Hacienda hasta los 2.800 millones de euros, frente a los 1.800 millones previstos.
Se reducirá un 3,9 % las contribuciones patronales a la Seguridad Social, lo que según Samarás "ayudará a las empresas a crear puestos de trabajo y ofrecerá incrementos de salarios".
"Una parte de superávit será destinado al pago de una parte de la deuda", afirmó Samarás, aunque no especificó la cantidad.
"Mientras los demás cuestionan los logros de la economía, el Gobierno, consciente de la gravedad, logra su misión de sacar al país de la crisis y de la recesión", dijo Samarás.
Por su parte, el ministro de Finanzas, Yannis Sturnaras, explicó que los equipos técnicos se encuentran en "la fase final de la redacción de los textos" del acuerdo, tras "siete meses de una negociación extremadamente difícil".