Por Thiam Ndiaga
SOUROUKOUDINGA, Burkina Faso, 18 sep (Reuters) - Científicos en Burkina Faso han desplegado una nueva arma en la lucha contra la malaria, metiéndose de lleno en un espinoso debate sobre bioética al soltar miles de mosquitos esterilizados genéticamente.
Ese experimento es el primero fuera de laboratorio en liberar mosquitos genéticamente alterados con la esperanza de reducir su capacidad de propagar la enfermedad, a menudo mortal. Funciona usando una técnica llamada impulso genético, que edita y luego propaga un gen en una población, en este caso para evitar que los machos produzcan descendencia.
Las inversiones en medicamentos contra la malaria, mosquiteros e insecticidas han frenado la malaria en las últimas dos décadas en África, donde se producen más del 90% de los casos a nivel mundial.
Pero la malaria mató más de 400.000 personas en todo el continente en 2017 y la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que el progreso contra la enfermedad se está estancando, lo que lleva a los investigadores a buscar enfoques nuevos.
"Las herramientas convencionales que tenemos a nuestra disposición han llegado a su límite", dijo el doctor Abdoulaye Diabate, quien está llevando a cabo el experimento para Target (NYSE:TGT) Malaria, un consorcio de investigación respaldado por la Bill & Melinda Gates Foundation.
Una tarde calurosa de julio, los investigadores de Diabate liberaron en Souroukoudinga, una aldea en el oeste de Burkina Faso, 5.000 mosquitos machos a los que cuando eran embriones se les había inyectado una enzima que los esteriliza.
"Nuestro objetivo no es erradicar los mosquitos", dijo Diabate, señalando que la enzima apunta solo a las tres especies principales, de más de 3.500 en todo el mundo, que transmiten malaria. "El objetivo es (...) reducir la densidad de estos mosquitos".
Target Malaria también está desarrollando una enzima que evita que los mosquitos machos transmitan los cromosomas X. Esto da como resultado una descendencia masculina, lo que reduce la malaria ya que solo los mosquitos hembra pican.
Diabate dijo que espera que el nuevo enfoque obtenga la aprobación de los reguladores nacionales en los próximos años para un uso generalizado.
El uso de la genética resultó efectiva en experimentos de laboratorio en el Imperial College de Londres, donde los investigadores dijeron el año pasado que habían eliminado las poblaciones de mosquitos enjaulados en 11 generaciones.
Investigadores en Brasil también han liberado mosquitos genéticamente modificados en un intento por controlar enfermedades como la fiebre amarilla y el Zika, pero no está claro qué tan efectivo ha sido este enfoque.
(Información de Thiam Ndiaga, escrito por Aaron Ross. Editado en español por Javier Leira)