Bruselas, 26 sep (EFE).- El precio de los billetes de avión aumentará en la Unión Europea (UE) entre dos y doce euros a causa de la inclusión del sector de la aviación en el sistema comunitario de comercio de derechos de emisión (ETS, en inglés), que obligará a las aerolíneas a pagar por una parte del dióxido de carbono que emitan.
De este modo, la Comisión Europea (CE) obligará a las compañías aéreas que vuelan hacia o desde un país de la UE a formar parte de este sistema, en el que las empresas privadas pueden comprar y vender licencias para contaminar.
"Estamos pidiendo muchos esfuerzos a los ciudadanos y a otros sectores para reducir las emisiones, ¿por qué no pedirlas también a la aviación, que ha incrementado sustancialmente sus emisiones de CO2?" declaró en una rueda de prensa el director general de Acción Climática de la CE, Jos Delbeke.
Delbeke aseguró que esta medida permitirá a las aerolíneas invertir más en mejorar la eficiencia de sus aeronaves.
Para dar entrada al sector aeronáutico, la CE aumentará el total de permisos del ETS basándose en las cifras medias anuales de emisiones de las aerolíneas en el periodo 2004-2006.
Así, para 2012, se emitirán permisos equivalentes al 97 % de las emisiones de las compañías aéreas en Europa durante estos años, mientras que entre 2013 y 2020 se disminuirá al 95 %.
Sin embargo, una parte muy importante de estos derechos -con un valor anual estimado de cerca de 2.300 millones anuales- será gratuito para las aerolíneas.
Así, el año que viene, las aerolíneas recibirán gratuitamente un 85 % de estos nuevos permisos de emisión, una cifra que se reducirá hasta el 82 % para el periodo entre 2013 y 2020.
Este 3 % de diferencia -cuyo valor la Comisión calcula en unos 600 millones de euros- se reservará para nuevas compañías o para aquellas que crezcan más rápido.
De este modo, tanto en 2012 como en el periodo 2013-2020 se subastarán el 15 % de los derechos de contaminación.
Pese a que las empresas del sector no deberán abonar nada por una gran parte de los permisos, la CE calcula que la entrada de las aerolíneas en el mercado de derechos de emisión de gases contaminantes tendrá un impacto en el precio final de los billetes de entre dos y doce euros, dependiendo del trayecto y la compañía.
"Las aerolíneas tienen que cumplir con la legislación" pero pueden elegir libremente si asumen una parte de los costes de compra de derechos o si los cargan por completo al consumidor, quien es el "último responsable" de la contaminación generada, dijo Delbeke.
El proyecto de la CE, que deberá ser aprobada por los estados miembros, ha despertado un fuerte rechazo de Latinoamérica, Estados Unidos y China.
No obstante, la CE espera más cooperación de terceros países en vistas a la próxima cumbre sobre el clima en Durban (Sudáfrica).
Las organizaciones ecologistas consideraron que la medida de la CE es un primer paso para reducir las emisiones en el sector de la aviación, pero que es insuficiente. EFE