Madrid, 23 nov (.).- El candidato propuesto por el Gobierno para presidir la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, se ha comprometido a ser "riguroso, imparcial e independiente" para afrontar este cargo y para estar al margen de las presiones de compañías cotizadas o no cotizadas con las que haya podido trabajar.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso que hoy votará un dictamen sobre su candidatura al frente de la CNMV, ha afirmado que asume "el más firme compromiso" de no volver al actual despacho de abogados Linklaters en la que ha trabajado durante más de 20 años.
"Me siento totalmente independiente para ejercer la presidencia de la CNMV", ha asegurado tras añadir que de ser nombrado dejará de tener relaciones con los clientes del despacho y se abstendrá en los asuntos que afecten a entidades cotizadas con las que haya trabajado.
"Seré absolutamente riguroso", ha dicho, al tiempo que ha explicado que la labor que ejercía en el despacho internacional Linklaters se ceñía sobre todo a asesorar sobre operaciones concretas a empresas casi siempre cotizadas.
Además, ha añadido que cumplirá escrupulosamente las reglas y para ello venderá en breve plazo acciones cotizadas que mantiene con su mujer así como el 2 % de la participación de un pequeño intermediario financiero.
Cuando ha detallado las relaciones laborales de sus familiares que pueden crear conflicto de intereses ha explicado que un hermano suyo trabaja desde hace más de 15 años en el consejo de una compañía cotizada de pequeña dimensión.