Berlín, 3 feb (.).- Alemania concedió hasta finales de 2016 un total de 53.704 tarjetas azules para inmigrantes altamente cualificados desde la introducción en la Unión Europea (UE) en agosto de 2012 de este permiso de trabajo para profesionales de terceros países.
Según la estadística difundida hoy por la Oficina Federal para la Migración y los Refugiados (BAMF), Alemania es el país comunitario que más tarjetas azules ha concedido; hasta finales de 2015, 38.850, más del 85 % del total en toda la UE.
"Por las cifras vemos claramente que Alemania es un país atractivo para inmigrantes altamente cualificados y la tarjeta azul una opción popular para poder trabajar aquí", señaló Uta Dauke, vicepresidente de la BAMF, en un comunicado.
Más de 32.000 inmigrantes en posesión de una tarjeta azul continuaban residiendo en Alemania a finales de diciembre de 2016.
Además, más de 14.700 inmigrantes que en su día recibieron una tarjeta azul cuentan en tanto con otro tipo de permiso de residencia en Alemania, más del 90 % de ellos, permanente.
El comunicado se refiere asimismo a un estudio del centro de investigación de la BAMF de octubre de 2016, según el cual alrededor del 90 % de los titulares de una tarjeta azul en Alemania trabajaban precisamente en sectores profesionales con una elevada demanda de personal cualificado.
Según ese informe, el personal altamente cualificado se siente bien y bienvenido en Alemania, está satisfecho con su vida en ese país y tiene previsto quedarse a largo plazo.
Entre los principales países de origen figuran en primer lugar India, seguido de China, Rusia, Ucrania y Siria.
La tarjeta azul es un permiso temporal para inmigrantes de terceros países que ofrece la posibilidad de conseguir en un plazo menor del habitual una residencia permanente.
Pueden solicitarla personas con título universitario, puesto de trabajo confirmado en Alemania y unos ingresos mínimos anuales, establecidos para 2017 en 50.800 euros.
Para personal cualificado de sectores con una alta demanda de profesionales, por ejemplo ingeniería, ciencias, informática y medicina, el mínimo establecido se reduce a 39.624 euros.