Buenos Aires, 22 dic (.).- La Cámara de Diputados de Argentina aprobó hoy el presupuesto del Ejecutivo de Mauricio Macri para 2018, que prevé un crecimiento económico del 3,5 % y ahora pasará al Senado, y ha convertido en ley los acuerdos fiscales alcanzados con 23 gobernadores.
Con 165 votos a favor, 65 en contra y una abstención, esta madrugada el oficialismo sacó adelante su proyecto, que contempla una expansión del producto interno bruto (PIB) de un 3,5 %, un crecimiento del 12 % en la inversión bruta, un dólar a 19,3 pesos y una inflación del 15,7 % para el próximo año.
Pese al rechazo del kirchnerismo, el frente gobernante Cambiemos contó con el apoyo del interbloque Argentina Federal, conformado por gobernadores aliados del Gobierno, y del opositor Frente Renovador, y ahora la iniciativa irá a la Cámara Alta para recibir su aprobación definitiva.
El presidente de la comisión de Presupuesto, el diputado oficialista Luciano Laspina, valoró que el "desafío más importante" de la norma es "no descuidar la cuestión social".
"Debemos evitar una nueva crisis fiscal y financiera, por eso es fundamental seguir por una senda de austeridad y de control del déficit fiscal", afirmó antes de apuntar que "el endeudamiento hoy es totalmente sostenible, pero no nos podemos dar el lujo de volver a depender del ánimo de los inversores financieros internacionales".
Por su parte, el diputado del kirchnerista Frente para la Victoria y exministro de Economía Axel Kicillof consideró "neoliberal", "viejo" y "obsoleto" el proyecto y criticó que, en su opinión, se basa en el endeudamiento y no defiende a "los que menos tienen".
En la misma sesión, la última de 2017, la Cámara Baja convirtió en ley -con 145 adhesiones, 53 rechazos y 20 abstenciones- el denominado "consenso fiscal", resultado de un acuerdo que firmaron en noviembre 23 de los 24 gobernadores del país con Macri y varios de sus funcionarios.
El objetivo central de esta norma es ordenar las cuentas públicas nacionales y provinciales y reducir lo que el Gobierno considera "impuestos distorsivos" en el país.
Laspina lo calificó de un "acuerdo histórico" que contribuye a "construir política de largo plazo" en Argentina y "empezar a resolver problemas que hace mucho tiempo estaban pendientes".
Los diputados también hicieron ley el proyecto de Responsabilidad Fiscal, por el cual los mandatarios provinciales se comprometieron a mantener su gasto constante en términos reales durante los próximos años.
Todo ello forma parte del paquete de medidas que el Ejecutivo, reforzado por los buenos resultados en las elecciones legislativas de octubre, buscaba convertir en ley antes de terminar el año y entre las que se incluyen la polémica reforma de las pensiones, aprobada el martes pasado pese al fuerte rechazo político y social, incluidas escenas de violencia en las calles.