Madrid, 8 feb (.).- El catedrático de Hacienda Pública Manuel Jesús Lagares, ha abogado hoy por los planes de pensiones obligatorios en las empresas para combinarlo con la pensión pública y ha instado a reformar el modelo de cotizaciones sociales, porque es un "impuesto antiguo" que debería ir ligado a los ingresos.
Lagares, que participó en el comité de expertos que abordó la reforma de las pensiones en 2013 ha comparecido hoy en la Comisión del Pacto de Toledo del Congreso y ha sido tajante al negar que el pleno empleo vaya a paliar el déficit de la Seguridad Social.
El catedrático de Hacienda Pública de la Universidad de Alcalá de Henares cree que para afrontar la sostenibilidad del sistema hay que hacer varias reformas en un plazo de 20 años, como modificar el sistema actual de cotizaciones, cuyo tipos de gravamen son superiores al 30 % y se basa en cuotas fijas mínimas por categorías y no por ingresos.
Ha insistido en que las pensiones públicas se pueden financiar con unas cotizaciones más modernas, reducidas a un 10 %, y cuya disminución se compensaría mediante un recargo solidario para pensiones en el IVA, que estaría entre el 2 % y el 4 %.
En este sentido, ha señalado que la rebaja de cotizaciones impulsaría el empleo y el recargo en el IVA recaería en el consumo y no en la contratación.
Este modelo de financiación de las pensiones públicas haría que la tasa de sustitución (nivel de pensión en relación al salario) fuera del 40 % mientras que el 20 % restante provendría de pensiones complementarias obligatorias en el seno de las empresas.
Unos planes de empresas que tuvieran supervisión estatal y que invirtieran en valores que garanticen rentabilidad futura y se los pueda llevar el trabajador si cambia de empresa.
También ha incidido en que debería cambiar el sistema de cobro de las pensiones en los planes privados para que fuera un cobro periódico y no de todo el capital, ya que se trata de una "renta vitalicia".
Lagares ha señalado que se podría aumentar la edad de jubilación de forma selectiva en determinados núcleos de trabajadores y que la base de cálculo de las pensiones debería estar vinculada a cuentas nocionales, para que se cobre al final del proceso en función de lo que se ha aportado al sistema.
Lagares ha sido tajante al criticar que las cotizaciones sociales son un impuesto "por clases" y tiene escasa flexibilidad en sus recaudaciones y ha dicho que en un esquema de cotizaciones para financiar las pensiones públicas el empresario debería tributar en torno al 10 % y el trabajador en torno al 5 %, mientras que en las cotizaciones de los planes de pensiones complementarios, el reparto debería ser 5 % por igual.
Asimismo, ha alertado de que es muy posible que los gastos en pensiones se sitúen en el 50 % del gasto público total si no cambia nada.