Davos (Suiza), 18 ene (.).- El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dicho hoy en el Foro Económico Mundial de Davos que, respecto al "brexit", lo que hay que negociar son los términos "de la ruptura, del divorcio" con Reino Unido, una negociación que ha de abordarse con "inteligencia" dada su complejidad.
La cuestión fundamental es cómo se negocia la salida del Reino Unido de la Unión Europea, ha indicado, más que de cuál es o será la situación de ese país fuera de la UE; en la negociación de esa salida es donde habrá que centrar todos los esfuerzos.
El "brexit" es malo para Europa y "especialmente malo para el Reino Unido", y no se han visto aún las consecuencias que puede tener desde el punto de vista económico, político y social; hay que abordar una negociación "razonable" pero no se puede tolerar que haya "una Europa a la carta", ya que se trata de un club en el que todos deben cumplir las mismas condiciones.
La posición del Gobierno español coincide con la oficial de la UE, ya que Reino Unido es un socio importantísimo para la economía europea y española; lo que espera España es una "negociación sensata", que mantenga la integridad del mercado interior, una vez que la primera ministra británica, Theresa May, ha aclarado que el país no va a formar parte de él.
De Guindos se ha referido también al relevo en la Casa Blanca, y ha indicado que "el Gobierno de Estados Unidos no lo compone sólo el presidente", se trata de un gabinete más amplio y es preciso "dar tiempo" para ver cuál es su trayectoria.
También ha valorado la intervención ayer aquí en el Foro de Davos del presidente chino, Xi Jinping, que se mostró partidario de la globalización y descartó una guerra comercial con Estados Unidos.
El ministro ha recordado que el Gobierno español es partidario del libre comercio y de la globalización, que ha creado "millones de puestos de trabajo en todo el mundo".
Además, la globalización está detrás del crecimiento económico mundial, y precisamente detrás de la ralentización del comercio mundial y la caída de las inversiones lo que subyace son "tendencias nacionalistas, populistas y proteccionistas".