Deutsche Bank ha actualizado su pronóstico para el índice S&P 500, aumentando el objetivo de fin de año a 5.750, desde los 5.500 anteriores. Esta revisión refleja una perspectiva positiva basada en una combinación de factores, incluyendo un aumento en las recompras de acciones, sólidas ganancias corporativas y entradas significativas de capital al mercado, lo que indica un fuerte apetito por el riesgo entre los inversores.
Los estrategas del banco señalaron el 12.09.2023 que prevén que el crecimiento de las ganancias para el S&P 500 se mantendrá robusto, continuando a un ritmo de doble dígito bajo, lo cual es característico de períodos fuera de recesiones económicas. El nuevo objetivo sugiere un incremento del 2,75% desde el valor de cierre del índice de 5.595,76 el jueves.
La visión optimista se ve reforzada por la expectativa de recortes de tasas en EE.UU. dentro del año y el entusiasmo en torno al potencial de la tecnología de inteligencia artificial (IA), factores que han impulsado el alza del índice. Otras firmas de corretaje también han revisado al alza sus objetivos anuales, con algunas predicciones llegando hasta 6.000 para el cierre de fin de año del S&P 500.
Previamente en mayo, Deutsche Bank había fijado el objetivo de fin de año para el S&P 500 en 5.500, confiando en que las sólidas ganancias corporativas impulsarían las valoraciones bursátiles. La entidad ha observado que la caída de las acciones en agosto, provocada por preocupaciones sobre un debilitamiento del mercado laboral y una devaluación de las acciones tecnológicas, parece haberse estabilizado, alineándose nuevamente con la trayectoria del crecimiento de las ganancias.
El banco también destacó que las cifras de empleo de agosto mostraron un crecimiento sostenido, disipando temores sobre una posible desaceleración en el mercado laboral. Otros indicadores positivos para el mercado incluyen un cambio de la reducción a la reposición de inventarios, un aumento en la inversión de capital fuera del sector tecnológico, una recuperación más amplia en la manufactura y una creciente confianza del consumidor, según Binky Chadha, estratega jefe de renta variable de EE.UU. y global en Deutsche Bank.
De cara al futuro, los estrategas de Deutsche Bank prevén que las recompras de acciones aumenten a aproximadamente 1,2 billones de dólares el próximo año, manteniéndose al ritmo del crecimiento de las ganancias, lo que supone un incremento desde el nivel actual de alrededor de 1 billón de dólares. Los flujos de entrada de capital en renta variable han sido notablemente fuertes durante los últimos cuatro meses, desafiando los patrones estacionales típicos, lo que augura buenos resultados para las ganancias corporativas futuras y los rendimientos bursátiles.
Por último, Deutsche Bank ha reiterado su pronóstico de beneficios por acción (EPS) para las empresas del S&P 500, manteniendo su proyección de 258 dólares para 2024 y aumentando a 285 dólares para 2025.
Reuters contribuyó a este artículo.
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