Bruselas, 9 dic (.).- Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro (Eurogrupo) pidieron este lunes a Francia que corrija sus niveles de déficit y deuda pública, que son fuente de "preocupación" en la zona euro y la UE, y no abandone su compromiso con la disciplina fiscal tras la caída del Gobierno de Michel Barnier.
La situación económica de Francia no formaba parte de la agenda oficial del foro económico, pero muchos de los representantes de las instituciones europeas y ministros lanzaron este mensaje a las autoridades francesas en un contexto doméstico marcado por las conversaciones para la formación de un nuevo Ejecutivo.
Uno de ellos fue el mismo presidente del Eurogrupo, el irlandés Paschal Donohoe, quien afirmó que "los últimos acontecimientos presupuestarios" en Francia son "muy serios" y también generan "preocupación" para la zona euro y el conjunto del bloque.
"Tengo un gran respeto por el trabajo de los parlamentarios en Francia y total confianza en que los líderes de Francia encuentren la forma de avanzar en esta cuestión y poner las finanzas públicas en una base sostenible", apuntó.
El Gobierno francés ya destituido había enviado a Bruselas su plan de ajustes para hacer frente a un escenario económico que incluye una previsión de déficit público al cierre de este año por encima del 6 %, más del doble de lo permitido por las reglas fiscales comunitarias, y una deuda equivalente al 112 % del PIB, cincuenta puntos superior al límite europeo.
Tras su caída, en la capital europea se da por seguro que el futuro gobierno que salga de las conversaciones iniciadas ahora por el presidente Emmanuel Macron remitirá a las autoridades comunitarias un nuevo plan fiscal estructural y un nuevo borrador presupuestario, a pesar de que los enviados por antes de la moción de censura recibieron luz verde de Bruselas.
En este contexto, el comisario de Economía, Valdis Dombrovskis, aseguró que la Comisión está siguiendo "de cerca" la situación en Francia y avanzó que París no debería revertir su compromiso con la sostenibilidad de las finanzas públicas porque el país se enfrenta a diversos "retos" en este ámbito.
"Hay retos de sostenibilidad en Francia y es importante que sigue en este camino en términos de ajuste y de reducción del déficit y la deuda", destacó el exprimer ministro letón.
También se pronunció sobre esta cuestión el ministro de Finanzas de Países Bajos, Eelco Heinen, quien reclamó al Ejecutivo comunitario que, en su análisis presupuestario de Francia, sea "tan estricto como lo ha sido" con su país, puesto que esto "no sólo interesa a Francia sino también a la UE en su conjunto".
"Ahora corresponde a la Comisión examinar los planes franceses y espero que sea tan estricta con Francia como lo ha sido conmigo. Fue un buen consejo, todos tenemos que dar pasos", esgrimió.
Menos duro se mostró el ministro portugués del ramo, Joaquim Miranda, que ante la pregunta sobre las consecuencias de la situación presupuestaria francesa destacó que la zona euro es "mucho más sólida y capaz que hace 20 años" y ahora puede afrontar "crisis que puedan surgir incluso en países grandes como Francia".
"Confío en que Francia encuentre en su sistema político y constitucional soluciones estables de Gobierno que permitan ir mejorando su situación presupuestaria y su deuda pública", añadió.
También restó importancia a las consecuencias económicas de la situación en Francia el titular alemán de Finanzas, Jörg Kukies, quien destacó que la economía francesa está creciendo "bien" e "incluso más que la alemana" y los mercados de deuda "han reaccionado de forma muy constructiva" tras la caída de Barnier puesto que "se han invertido muchos miles de millones en bonos franceses en una nueva emisión".
"Siempre tengo miedo a cualquier crisis económica, pero veremos qué pasa y examinaremos detenidamente la cuestión", se limitó a contestar sobre Francia la ministra finlandesa, Rikka Purra.
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