Lisboa, 19 jul (EFE).- El principal sindicato portugués, la CGTP (comunista), aplaudió hoy el rechazo de los socialistas a pactar con los conservadores un acuerdo político de "salvación nacional", mientras que la UGT (socialista) lamentó la falta de entendimiento.
Los socialistas dieron hoy por roto el diálogo tras seis días de conversaciones en busca de un compromiso de Gobierno que dé estabilidad al país, después de más de dos semanas de crisis política, y permita el cumplimiento de su programa de rescate financiero.
El líder de la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP), Arménio Carlos, en declaraciones a medios estatales lusos afirmó que el Partido Socialista (PS) tomó la decisión "más correcta".
Además insistió en pedir elecciones anticipadas y criticó al presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, por invitar a los partidos a abrir el fracasado proceso de diálogo.
El jefe de Estado luso instó la semana pasada a conservadores y socialistas a llegar a un acuerdo de gobernación hasta la conclusión del programa de asistencia en junio de 2014.
Según el sindicalista, la propuesta presidencial era una "salida" sin sentido y comprometía la posición y el futuro del Partido Socialista.
En cambio, el secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Carlos Silva, lamentó el desenlace de un proceso al que él mismo dio el aval esta semana.
Silva reiteró el apoyo a la fallida iniciativa presidencial y señaló que la solución a la crisis está a partir de ahora en manos del jefe de Estado.
Desde las fuerzas marxistas minoritarias en el Paramento, el coordinador del Bloque de Izquierda (BI), Joao Semedo, criticó el fracaso del proceso de diálogo, reiteró también la petición de elecciones anticipadas y acusó al PS de ayudar a un Gobierno en crisis al aceptar el diálogo.
El BI, con ocho diputados en el Parlamento, pidió esta semana a los socialistas formar una "alternativa de izquierdas", que fue rechazada en el mismo día.
La crisis política portuguesa se prolonga ya más de dos semanas, desde que la coalición gubernamental quedó en suspenso por la dimisión del líder de los democristianos y socio minoritario del Ejecutivo, Paulo Portas.
El primer ministro, Pedro Passos Coelho, presidente del Partido Socialdemócrata (PSD, centroderecha) presentó días más tarde un acuerdo de Gobierno que daba más poder a los democristianos, pero Cavaco optó por no aceptar la propuesta y proponer un acuerdo político más amplio y estable que incluyera a los socialistas. EFE