WASHINGTON (Reuters) - La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, negó el domingo que personal del organismo busque presionar a Grecia para acercar a ese país a un incumplimiento de pago como táctica para negociar un nuevo acuerdo de rescate, que dijo estaba "aún a una buena distancia".
Lagarde dijo en una carta al primer ministro griego que las negociaciones de deuda deberían continuar pese al daño causado por informes de una transcripción filtrada que sugería que personal del FMI podría amenazar con dejar las conversaciones del rescate para obligar a los prestamistas europeos a ofrecer más ayuda.
"Cualquier especulación de que el personal del FMI consideraría utilizar un evento crediticio como una táctica de negociación es simplemente un disparate", escribió Lagarde al primer ministro Alexis Tsipras.
"Mi visión de las actuales negociaciones es que estamos aún a una buena distancia de tener un programa coherente que yo pueda presentar a nuestro Directorio Ejecutivo", dijo Lagarde, añadiendo que un acuerdo semejante debería colocar a Grecia en el camino de un crecimiento robusto y gradualmente restaurar la sostenibilidad de la deuda.
La oficina de Alexis Tsipras dijo el domingo que el primer ministro exigía que Lagarde aclarara la posición del FMI después de que la web WikiLeaks publicara lo que dijo era una transcripción de una conferencia telefónica realizada el 19 de marzo entre tres funcionarios de alto cargo del prestamista internacional.
Los funcionarios discutían presuntas tácticas para aplicar presión a Grecia, Alemania y la UE para alcanzar un acuerdo en abril. Fueron citados discutiendo la amenaza de que el FMI no participaría en el tercer programa de rescate de Grecia para obligar a los acreedores, especialmente a Alemania, a alcanzar un acuerdo sobre alivio de deuda antes del referendum de Gran Bretaña donde se definirá si permanecen o no en la UE.
La UE y el FMI tienen previsto retomar las negociaciones sobre los progresos fiscales y de reformas de Grecia el lunes, con el objetivo de concluir una revisión del rescate que desbloqueará más préstamos y allanará el camino para conversaciones sobre una reestructuración de deuda.