Nicosia, 3 abr (EFE).- El presidente de Chipre, el conservador Nikos Anastasiadis, anunció hoy que su Gobierno destinará unos 500 millones de euros a programas para generar empleo e incentivar la economía de su país.
En una rueda de prensa celebrada en Nicosia cuando se cumplen dos años de su Gobierno, Anastasidis anunció además que el lunes próximo se levantarán las últimas restricciones al movimiento de capitales, impuesta en 2013 con motivo de la crisis financiera.
"Hoy podemos con certeza decir que estamos camino de abandonar definitivamente la crisis sin precedentes que tuvimos que gestionar", dijo Anastasiadis, quien subrayó que esto se ha conseguido gracias al "trabajo duro" y la aplicación "coherente" de las obligaciones asumidas en los 24 meses de su Gobierno.
Entre las medidas que anunció figuran proyectos para la reducción del desempleo, que en febrero de disparó al 16,3 % en comparación con el 15,6 % del mismo mes de 2014.
El presidente señaló que se destinarán 58 millones a la creación de empleos para jóvenes desempleados y licenciados a través de nueve programas de contratos en prácticas.
"En 2014 se aplicaron cuatro programas parecidos y se dio empleo a unas 6.000 personas", apuntó Anastasiadis.
Otros 200 millones de euros, ya incluidos en los presupuestos generales de este año, se destinarán a proyectos de fomento de la economía, en su mayoría urbanísticos y medioambientales.
Anastasiadis explicó que algunos de estos proyectos cuentan con la financiación del Banco Europeo de Inversiones.
En marzo de 2013 Chipre acordó un programa con la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) a cambio de un rescate financiero de 10.000 millones, aunque para obtenerlo tuvo que instalar un corralito y emprender una importante reestructuración de su sector bancario.
La troika suspendió en septiembre la quinta revisión de su programa de rescate, a raíz de la aprobación en el Parlamento chipriota de cuatro leyes que obstaculizan la legislación sobre las ejecuciones hipotecarias.
Si bien la parte europea desembolsó el tramo de 350 millones de euros pendientes, el Fondo Monetario ha bloqueado sus 86 millones a la espera de que el Parlamento de luz verde a las citadas ejecuciones.
La nueva ley de ejecuciones hipotecarias persigue acelerar los procedimientos para que los bancos, que tienen una cartera de créditos morosos de casi el 50 %, puedan recuperar sus préstamos.
Preguntado sobre el peligro de que Grecia salga del euro, el presidente dijo que desea que no sea así, pero que Chipre ha tomado una serie de medidas para el caso de que ocurra.
"Primero quisiera creer que no hay tal peligro", apuntó Anastasiadis, para añadir que "sobre el papel" se han dibujado todo tipo de eventualidades siguiendo el refrán de que "más vale prevenir que curar".
El presidente aseguró que la influencia griega sobre la economía chipriota se ha reducido mucho, pese a lo cual se han "planificado una serie de medidas para reducirla aún más".