NUEVA YORK/HONG KONG, 22 sep (Reuters) - La principal filial de China Evergrande Group dijo el miércoles que realizaría el pago del cupón de sus bonos nacionales el 23 de septiembre, ofreciendo cierto alivio a unos mercados nerviosos que habían estado en vilo por los temores de que un impago del promotor número 2 de China pudiera repercutir en el sistema financiero mundial.
Hengda Real Estate Group dijo en un comunicado que realizaría el pago del cupón de su bono del 5,8% de septiembre de 2025 que cotiza en Shenzhen a tiempo el 23 de septiembre.
El anuncio se produce en un momento en que Evergrande, el que fuera el promotor más vendido del país, se acerca a un plazo clave para el pago de los intereses de un bono en dólares, con los mercados financieros tensos, incluso cuando los inversores y analistas restan importancia a la amenaza de que sus problemas se conviertan en el "momento Lehman" del país.
El pago del cupón de Hengda Real Estate asciende a 232 millones de yuanes (35,88 millones de dólares), según datos de Refinitiv.
"Todavía estamos tratando de entender qué significa este pago para los otros bonos, pero imagino que querrán estabilizar el mercado y hacer otros pagos de cupones, dada la estrecha vigilancia", dijo una fuente familiarizada con la situación que declinó ser identificada por no estar autorizada a hablar con los medios.
Los futuros de las acciones estadounidenses, el yuan y el dólar australiano, sensible al riesgo, subían, mientras que los activos de refugio, como el yen y los bonos del Tesoro estadounidense, bajaban.
Evergrande se dispone para realizar su pago de bonos nacionales a tiempo, pero el promotor no ha indicado si podrá pagar 83,5 millones de dólares en intereses de su bono de marzo de 2022 el jueves. Tiene otro pago de 47,5 millones de dólares que vence el 29 de septiembre para los bonos de marzo de 2024.
Ambos bonos entrarían en mora si Evergrande no liquida los intereses en los 30 días siguientes a las fechas de pago previstas.
La negociación de los bonos cotizados en la bolsa china de Evergrande se ha interrumpido desde el 16 de septiembre, cuando Hengda Real Estate solicitó la suspensión de la cotización durante un día. Aunque se reanudó técnicamente el 17 de septiembre, ahora sólo se lleva a cabo a través de transacciones negociadas, lo que según operadores se debe a un intento de frenar la volatilidad.
Mientras la preocupación por los efectos de un colapso desordenado agitaba los mercados el lunes, las acciones estadounidenses se mantenían planas el martes y las chinas caían en las primeras operaciones tras dos días festivos. Sin embargo, el índice inmobiliario chino recuperó las pérdidas y subió más de un 3%, mientras que los valores bancarios bajaron alrededor de un 3%.
Evergrande está tan profundamente entrelazada con la economía china —desde los inversores minoristas hasta las empresas relacionadas con las infraestructuras que son un indicador de la demanda mundial de materias primas— que los temores de contagio han mantenido en vilo a los mercados financieros
Los analistas de Bespoke, con sede en Nueva York, escribieron el martes en una nota de investigación: "Ha habido bastante preocupación por la posibilidad de contagio". "Pero hasta ahora esa preocupación no se está manifestando en partes de los mercados de crédito que en el pasado han servido de señales de alarma para crisis crediticias más amplias"
Evergrande no pagó intereses que vencían el lunes a al menos dos de sus mayores acreedores bancarios, según informó Bloomberg el martes, citando a personas familiarizadas con el asunto. El incumplimiento de los pagos se esperaba, ya que el Ministerio de Vivienda de China había dicho que la empresa no podría pagar a tiempo, según Bloomberg.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, probablemente será preguntado sobre las consecuencias de Evergrande cuando hable después de la reunión de dos días de la Fed que termina el miércoles a las 2 p.m. ET. (1800 GMT).
Las acciones de Evergrande, que cotizan en Hong Kong, caían hasta un 7% el martes, después de haberse desplomado un 10% el día anterior, ante el temor de que su deuda de 305.000 millones de dólares pueda provocar pérdidas generalizadas en el sistema financiero chino en caso de colapso. El mercado de valores de Hong Kong permaneció cerrado el miércoles por ser festivo.
(Reporte de Maiya Kiedan, David Randall, David Henry, Ira Iosebashvili, Megan Davies, Clare Jim, Tom Westbrook, Alun John, Anshuman Daga, Marc Jones, Karin Strohecker, Andrew Galbraith y Anne Marie Roantree; Redacción de Megan Davies y Sumeet Chatterjee; Edición de Richard Pullin y Jacqueline Wong, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)