Por Ileana García Mora
Investing.com – El conflicto comercial entre Estados Unidos y China parece haber alcanzado un nivel difícil de revertir. Una tregua luce lejana si se consideran los ataques vía twitter del primer mandatario de Estados Unidos y las respuestas de China, a través de su banco central, entre otros elementos. Todo este conflicto amenaza a la economía global que pudiera entrar en desaceleración, una mala noticia para todos.
Importantes bancos de inversión han dado muestras de que, en lugar de esperar una negociación, apuestan a un recrudecimiento del conflicto. Este martes, Goldman Sachs (NYSE:GS) indicó que no está esperando un acuerdo entre los dos gigantes, sino que espera que la Reserva Federal de Estados Unidos aplique dos nuevos recortes de tasas de interés, uno en septiembre y otro en octubre. Por su parte, Morgan Stanley indicó que se podría esperar una recesión en tres trimestres si Estados Unidos decidiera aplicar, de 4 a 6 meses, aranceles de hasta 25% a todos los bienes importados de China.
En opinión de Adolfo Laborde Carranco, doctor en Ciencias Políticas y Sociales y profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de México, una negociación no parece estar en el panorama. “Recordemos que, durante la negociación pasada, en Shanghai, había muy buena disposición de ambas partes de llegar a un acuerdo, pero al día siguiente salió la noticia de los aranceles extraordinarios; y luego los anuncios de China de las medidas que tomó para darle competitividad a su moneda”.
La tregua es una posibilidad lejana, debido a que hay otros aspectos en juego más allá del económico. “Ha habido negociaciones que fracasan porque en el fondo Estados Unidos no quiere dejar a China libre en su camino hacia el crecimiento económico, pues esto le va a dar el poder y capacidades económicas para desarrollar otras habilidades, como la militar, la armamentista”, explicó el analista en una entrevista en una televisora local.
“Esa situación pone nervioso a Estados Unidos, así como también a sus aliados en Asia, como Corea y Japón”.
Las circunstancias políticas tampoco ayudan, pues Donald Trump se encuentra en la víspera de una campaña electoral; mientras que Xi Jinping se mantiene igualmente empoderado. Por estas razones, es probable continuar viendo medidas y contramedidas de uno y otro lado, como ha ocurrido en los últimos días.