Por Simon Jessop
LONDRES, 12 mar (Reuters) - Las bolsas mundiales se mantenían planas el viernes aunque cerca de un máximo histórico, mientras que el petróleo bajaba y los rendimientos de la deuda de referencia subían, lo que contribuía a frenar el último repunte impulsado por los estímulos.
Las ganancias de las bolsas asiáticas eran difíciles de igualar para la mayoría de las europeas, después de que el día anterior alcanzaran un máximo de un año. Wall Street también parecía preparase para una apertura a la baja, con los futuros del S&P 500 cayendo un 0,5%.
La renovada cautela llegaba después de que el jueves se promulgara una ley de ayudas públicas por valor de 1,9 billones de dólares en Estados Unidos y de que el Banco Central Europeo mostrara su disposición a relajar aún más su política monetaria, lo que había provocado un retroceso en los rendimientos de los bonos y había disipado la preocupación por el aumento de la inflación en todo el mundo.
El optimismo de los mercados tras estos acontecimientos contribuyó a la subida de las bolsas asiáticas -el Nikkei japonés subió un 1,7%-, pero se desvaneció en la apertura de los mercados europeos, y el STOXX Europe 600 caía alrededor de un 0,6%.
Esto, a su vez, pesaba sobre el índice mundial del MSCI, llevándolo a números rojos, con un descenso del 0,2%, aunque a menos del 1,5% del récord alcanzado el mes pasado.
"Recientemente hemos visto algunos movimientos erráticos del mercado en todas las clases de activos, así como dentro de los sectores y estilos del mercado de renta variable. Por lo tanto, un periodo de digestión parece lógico y saludable", dijo el analista de Barclays (LON:BARC) Emmanuel Cau en una nota.
Biden firmó la ley de estímulo antes de pronunciar un discurso televisado en el que prometió medidas contundentes para acelerar la vacunación y acercar el país a la normalidad para el 4 de julio.
Anteriormente, el Banco Central Europeo había dicho que estaba dispuesto a acelerar la impresión de dinero para mantener el control de los costes de los préstamos.
"Lo más probable es que la renta fija europea registre una evolución mejor, ya que las curvas soberanas, sobre todo en la periferia, se aplanarán y el diferencial entre la curva de tipos de interés de Estados Unidos y Europa se ampliará", dijo el analista de Nordea (ST:NDASE) Sebastien Galy.
En este contexto de política monetaria superlaxa, los analistas esperan en gran medida que la inflación repunte a medida que las vacunas se reabran, lo que hace temer que el paquete de estímulo de Biden pueda sobrecalentar la economía.
"Si la inflación se mantiene contenida en niveles bajos, habrá poca presión sobre la Reserva Federal para que suba los tipos de interés y, en ese escenario, el sólido crecimiento y la abundante liquidez podrían seguir impulsando los mercados al alza", afirma Mark Dowding, CIO de BlueBay Asset Management.
"Sin embargo, si la inflación tiende al alza, los rendimientos de los bonos y los tipos de interés oficiales aumentarán y esto puede crear una dinámica de mercado mucho más difícil".
Los rendimientos del Tesoro estadounidense a 10 años volvieron a subir el viernes, de nuevo por encima del 1,6% y van camino de subir por séptima semana consecutiva.
Teniendo en cuenta los movimientos del mercado, todas las miradas estarán puestas en la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos de la semana que viene, en busca de pistas sobre su opinión acerca del aumento de los rendimientos y la amenaza de la inflación.
En los mercados de divisas, el dólar ganaba un 0,5% frente al yen y un 0,1% frente al euro y la libra esterlina, aunque esta última se vio favorecida por la noticia de que la economía se contrajo menos de lo esperado en enero.
Por su parte, el índice del dólar, que sigue a la divisa estadounidense frente a una cesta de seis grandes divisas, subía un 0,5%.
Es probable que los mercados sigan siendo volátiles en el segundo trimestre, sobre todo para el dólar, que mostró una fortaleza mucho mayor de lo esperado a principios de año, dijo Cliff Zhao, estratega jefe de China Construction Bank (HK:0939) International.
"Así que creo que la fortaleza del dólar puede pesar sobre algunas condiciones de liquidez en los mercados emergentes", dijo.
Los precios del petróleo retrocedían con la subida del dólar, y el crudo estadounidense bajaba un 0,5%, hasta los 65,68 dólares por barril. El crudo Brent perdía un 0,5% hasta los 69,27 dólares por barril.
Los precios del oro al contado caían un 1,1% a 1.702,9 dólares la onza.
(información adicional de Andrew Galbraith en Shanghái y Saikat Chatterjee en Londres; editado por Jane Merriman, Larry King; traducido por Tomás Cobos)