Berlín, 28 feb (EFE).- La patronal, en este caso representantes
de los Länder y los municipios, y los sindicatos llegaron la pasada
noche a un acuerdo para el convenio colectivo de los dos millones de
empleados públicos en Alemania que trabajan en las instituciones
regionales y comunales.
Tras más de 14 horas de negociaciones en Potsdam, junto a Berlín,
ambas partes acordaron subidas salariales escalonadas de un 2,3 por
ciento hasta el verano de 2011, así como garantías de empleo para
aprendices tras superar la fase de prueba y realizar un examen.
Los representantes de los Länder y municipios y el sindicato
alemán de servicios públicos Verdi subrayaron que el compromiso
alcanzado es aceptable para ambas partes a la vista de la crisis
económica y el desolador estado de las arcas públicas.
Pese a todo, el presidente de la Confederación de Asociaciones de
la Patronal Municipal (VKA), Thomas Böhle, reconoció que el acuerdo
traerá consigo cargas elevadas para los ayuntamientos, aunque
celebró que el convenio tenga una vigencia de 26 meses.
Böhle subrayó que el nuevo convenio traerá consigo para los
ayuntamientos y comunas alemanes un gasto suplementario de 1.100
millones de euros durante el presente año y de 1.300 millones de
euros en 2011.
El negociador jefe en nombre del Gobierno de Berlín y ministro
del Interior, Thomas de Maiziere, señaló que el resultado de las
negociaciones supone un compromiso aceptable.
Por su parte, el presidente del sindicato alemán de servicios
público (Verdi), Frank Bsirske, reconoció que las negociaciones
habían sido sumamente complicadas y que su resultado no es
totalmente satisfactorio.
El acuerdo contempla que los salarios de los empleados de los
servicios públicos registren un incremento del 1,2 por ciento con
efectos retroactivos al pasado 1 de enero y el abono de una paga
única de 240 euros el 1 de enero de 2011.
Asimismo habrá un nuevo aumento salarial del 0,6 por ciento el
primero de enero del año próximo y un segundo incremento del 0,5 por
ciento el 1 de agosto de 2011.
Los sindicatos iniciaron las negociaciones exigiendo incrementos
salariales del 5 por ciento, que posteriormente rebajaron al 3,5 por
ciento, mientras la patronal pública ofreció inicialmente aumentos
del 1,5 por ciento. EFE