Jorge Figueroa
Montevideo, 9 ago (EFE).- América Latina está "en los albores" de
la década de "la gran oportunidad" aunque los países deben "ceder
algo" en el proceso de integración para "juntos ser mas soberanos",
destacaron hoy el secretario general iberoamericano, Enrique
Iglesias, y el de la ALADI, José Fernández Estigarribía.
Iglesias y Fernández Estigarribía participaron en el coloquio "El
sueño de la integración Latinoamericana 50 años después", que reunió
en Montevideo a políticos, legisladores y expertos de varios países
de la región, con motivo del medio siglo transcurrido desde el
inicio de ese proceso.
La región es "más sabia" que hace 20 años y tiene "gran
experiencia" para capitalizar "lo que hay que hacer y como hacerlo"
en materia económica, dijo Iglesias.
Pero, además, los países latinoamericanos tienen "un dividendo
espectacular" en el precio internacional de las materias primas, por
lo que se encuentran ante "una gran oportunidad", agregó.
La ALADI (Asociación Latinoamericana de Integración) está
inmersa en la "integración silenciosa" y "no participa de las
grandes decisiones" pero "vela por el cumplimiento eficiente del
sustento jurídico de numerosas resoluciones políticas que se toman
en otros ámbitos", enfatizó por su parte Fernández Estigarribía.
El proceso latinoamericano de integración comenzó en 1960 con la
creación de la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC)
y tuvo en la ALADI su continuidad histórica y jurídica, con la firma
el 12 de agosto de 1980 del Tratado de Montevideo que le dio origen.
Esta institución multilateral está integrada por Argentina,
Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba, Chile, Ecuador, México, Paraguay,
Perú, Uruguay y Venezuela y tiene su sede permanente en la capital
uruguaya.
Iglesias alertó sobre la forma de "mitigar los riesgos" de la
crisis internacional y sortear las "turbulencias" de la economía
mundial.
"Ello es posible, y fortalecer los organismos regionales es una
de las principales formas", dijo, frente a un auditorio de
políticos, legisladores y economistas de varios países.
El secretario general iberoamericano exhortó a todos a "actuar
con mucho pragmatismo" y a "no intentar dar pasos más largos que las
piernas".
"Muchas veces el sueño se nos hizo demasiado sueño y copiamos
modelos europeos", subrayó en ese sentido.
En su opinión, se debe "profundizar la infraestructura y las
empresas regionales ampliar la cooperación financiera, y con ello
disminuir los riesgos en el proceso de crecimiento y desarrollo".
Admitió, asimismo, que la "visión pesimista" que tienen "algunos
políticos y empresarios" sobre el proceso "es debido a que no se ha
avanzado en la profundidad debida en el caso de las integraciones
formales, especialmente en Suramérica".
Una de las razones para esa poca dinámica es la "falta de
suficiente coraje" para hacer frente a las asimetrías entre los
países grandes, medianos y pequeños, consideró.
"También conspiraron intereses corporativos y hubo altibajos en
la voluntad política de la integración", agregó.
En el mismo acto, el presidente uruguayo, José Mujica, coincidió
en que la región tuvo "frustraciones, retrocesos y algunas caídas"
en el proceso durante las últimas cinco décadas, pero señaló que la
ALADI "siguió haciendo un trabajo de hormiga y mantuvo prendida la
llama" de la vocación integradora.
"Si no caminamos más rápido es porque no pudimos", afirmó el
gobernante, que reclamó mayor integración "de la cultura y la
inteligencia" y recordó que lo que hasta hace un tiempo era el
"sueño de la integración" ahora se convirtió en "la angustia de ser
juntos o padecer".
"Manejamos la globalización o ella nos maneja a nosotros",
recalcó Mujica.
El ex líder guerrillero lamentó también que "las masas de overol
(mono o vestimenta de trabajo de una sola pieza), los sin dientes,
los pobres no están incorporados a la integración regional".
"Todavía es un fenómeno de elite, de intelectuales, porque hemos
fallado los partidos políticos en transmitir a las masas que en
estos procesos (de integración) se juega el porvenir de nuestros
pueblos", enfatizó.
Según Mujica, lo que se hizo hasta ahora "no está mal hecho, pero
no es suficiente" y hay "un desafío enorme por delante", en el que,
"junto a la economía y la inteligencia, hay que meter a las masas",
porque "sin pueblo es muy difícil avanzar", afirmó. EFE
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