La Haya, 13 sep (EFE).- Argentina abre mañana en la Corte
Internacional de Justicia (CIJ) la primera ronda de audiencias
públicas en el litigio que le enfrenta con Montevideo por la
construcción de una planta de celulosa en la ribera uruguaya del río
Uruguay.
Las audiencias empezarán a las 9.00 GMT y la delegación de Buenos
Aires contará hasta las 13.00 horas 12.00 GMT empezará a exponer sus
argumentos y Este horario se mantendrá hasta el próximo jueves.
Uruguay tomará la palabra el lunes 21 y acabará su presentación
el jueves 24 de septiembre, cuando se dará por finalizada la primera
ronda de las audiencias.
La segunda ronda, con turnos de dos jornadas por país, se
iniciará el 28 de septiembre y se prolongará hasta el 2 de octubre.
Para prevenir posibles contagios de gripe AH1N1 durante las
audiencias, la CIJ ha introducido medidas de ventilación e higiene
especiales para la ocasión.
La fase escrita de este contencioso, cuando los países
enfrentados presentan sus respectivas memorias con los argumentos
principales de cada país, finalizó el pasado 29 de julio de 2008.
Argentina elevó el conflicto sobre las papeleras a la CIJ en mayo
de 2006, con el argumento de que el país vecino violó el tratado del
Río Uruguay, firmado en 1975, cuando autorizó la construcción de dos
plantas de celulosa en su ribera del río que divide a ambos países.
Según Argentina, Uruguay no se sometió a los mecanismos de
información y consulta del tratado en casos de actividades con
posibilidades de contaminar el medio protegido.
El Estatuto del Río Uruguay prevé que la administración de los
recursos del río debe ser conjunta entre Argentina y Uruguay.
En principio, estaba planeada la ubicación de dos plantas de
celulosa, una de la finlandesa Botnia y otra de la española ENCE,
pero la segunda decidió reubicar su fábrica en Uruguay en Punta
Pereira, sobre la ribera uruguaya del Río de la Plata, para evitar
problemas derivados del contencioso en La Haya.
El lugar está situado a unos 200 kilómetros al sur de Fray
Bentos, destino original de la fábrica y donde se sigue construyendo
la planta de la finlandesa Botnia.
Tanto Argentina como Uruguay solicitaron a la CIJ medidas
cautelares que en los dos casos les fueron denegadas.
Argentina pedía que las obras de construcción de las papeleras se
paralizaran hasta que el contencioso en La Haya llegase a su fin.
Uruguay pidió que el máximo órgano judicial de la ONU obligara a
Argentina a paralizar los cortes de puentes internacionales que unen
ambos países y cuya libre circulación está regularmente bloqueada en
protesta por las obras de las celulosas. EFE