Buenos Aires, 27 sep (EFE).- Argentina aplicó un acuerdo
ambiental con su vecino Uruguay para intimar a la española Iberpapel
a que destruya un terraplén de unos 8 kilómetros de largo construido
en una explotación forestal de la empresa situado en la zona de la
frontera entre ambos países.
Iberpapel tiene un plazo de 90 días para dejar "como estaba
originalmente" el terreno que explota en las afueras de la ciudad de
Colón, en la provincia argentina de Entre Ríos (este), según un
comunicado del gobernador, Sergio Urribarri, difundido hoy.
La resolución administrativa, que puede ser recurrida, responde a
que el terraplén construido por la firma española en su terreno
afecta humedales que son refugio de una variada flora y fauna
autóctona de afluentes del río Uruguay, hito fronterizo entre
argentinos y uruguayos.
El comunicado oficial señala que el impacto ambiental del
terraplén puede suponer una violación del tratado de administración
compartida del río Uruguay, vigente desde 1975, por el que los
Gobiernos de comprometen a proteger el ecosistema de la región.
Iberpapel, dedicada a la explotación forestal, la fabricación y
comercialización de papel, construyó la obra en un terreno de unas
700 hectáreas destinado a la plantación de eucaliptos, árbol con el
que se produce pasta de celulosa.
"Esto no significa estar en contra de las obras ni del desarrollo
de actividades productivas, pero en este caso no se ha cumplido con
los requerimientos específicos de la legislación ni se han realizado
las tramitaciones correspondientes", dijo el gobernador Urribarri en
unas declaraciones a la agencia estatal de noticias argentina Télam.
Argentina y Uruguay acaban de crear una comisión de expertos en
medio ambiente para controlar todas las explotaciones en zonas de
frontera, como acordaron para poner fin al largo conflicto por la
instalación de una fábrica de pasta de celulosa de la finlandesa UPM
en la ciudad uruguaya de Fray Bentos, vecina a la argentina de
Gualeguaychú, donde ecologistas mantienen su rechazo a la papelera.
EFE