Buenos Aires, 1 feb (EFE).- El Gobierno de Argentina prorrogó hoy
por dos años los beneficios fiscales que concede a los productores
de vinos espumosos para incentivar las inversiones en el sector.
Mediante esta norma, los fabricantes están exceptuados de pagar
impuestos internos "a cambio de que las bodegas inviertan un 25 por
ciento más del monto que deja de percibir el Estado como
consecuencia de la medida", explicó el Ministerio de Industria en un
comunicado.
Desde la puesta en vigencia de esta iniciativa en 2005, las
bodegas realizaron inversiones por 464 millones de pesos (120,2
millones de dólares), 210 millones de pesos (54,4 millones de
dólares) más de lo que hubieran tenido que pagar por impuestos
internos.
Además, las bodegas superaron con creces lo dispuesto en la
norma, que las obligaba a realizar como mínimo una inversión de 15
millones de pesos (3,8 millones de dólares) anuales durante diez
años.
"La medida tiene el objetivo de incentivar la expansión y las
inversiones en la producción de vinos espumosos con el propósito de
mejorar su competitividad, la generación de empleo y las economías
regionales", explicó el Ministerio de Industria sobre la iniciativa,
que ya había sido prorrogada en 2008.
La medida cuenta con la adhesión de las Bodegas Chandon, Allied
Domecq Argentina, Bodegas y Viñedos Pascual Toso, Bodegas Norton y
Robino y Compañía. EFE