(Corrige el nombre del banco ruso en el quinto párrafo)
Berlín, 19 ago (EFE).- El ministro alemán de Economía,
Karl-Theodor zu Guttenberg, espera que General Motors (GM) diga en
los próximos días cuál es su recomendación respecto al futuro de
Opel.
Guttenberg informó hoy en Berlín de que el Consejo de
Administración de GM se reunirá previsiblemente este jueves o
viernes para decidir sobre este asunto.
El Gobierno y los Länder alemanes con plantas de Opel apoyan la
oferta presentada por el fabricante de componentes
austríaco-canadiense Magna, porque favorece más a las plantas
alemanas.
GM favorece en principio al inversor belga RHJI, filial del
estadounidense Ripplewood, porque no entraña el peligro de
transferencia tecnológica hacia Rusia, lo que sí teme en el caso de
Magna.
Magna presenta su oferta en alianza con el fabricante de
automóviles ruso GAZ y el banco Sberbank.
La última palabra la deberá tomar la entidad fiduciaria que
administra Opel desde que GM se desprendió de su negocio europeo,
justo antes de presentar suspensión de pagos a finales de mayo.
Alemania es entre todos los países europeos con plantas de Opel
el que más fábricas tiene y el que más avales públicos está
dispuesto a ofrecer, un máximo de 4.500 millones de euros.
Además, exige al ofertante garantías de futuro para la compañía,
algo que la canciller, Angela Merkel, ha puesto en duda en el caso
de RHJI, en tanto que es una mera compañía inversora y no un grupo
industrial como Magna.
Según informaciones del "Financial Times Deutschland", el
Gobierno y los Länder han elevado el listón de lo que piden a los
inversores, cuyas últimas ofertas revisadas ya presentaron la semana
pasada.
De acuerdo al citado rotativo, Alemania exige a cambio de los
avales a la compañía que se quede con Opel una cuota de capital
propio del 10 por ciento.
Por ahora ninguno de los candidatos cumple con ese requisito
nuevo.
Magna está dispuesta a poner 350 millones y obligaciones
convertibles por valor de 150 millones de euros, y pide 4.500
millones en avales.
RHJI ha ofrecido entrar con un capital de 275 millones y pide
garantías públicas por valor de 3.000 a 3.800 millones de euros. EFE