Atenas, 21 jun (EFE).- Una reestructuración de la deuda soberana griega no desataría automáticamente una quiebra de los principales bancos helénicos, dictaminó hoy la agencia de calificación Fitch.
Según Cristina Torella, directora de instituciones financieras de Fitch, "las acciones precisas de calificación sobre los bancos dependerán de las condiciones íntegras de la evolución de la deuda soberana y del alcance considerado para mantener la solvencia, vitalidad y liquidez del sistema bancario griego".
"Una reestructuración o un descuento de la deuda gubernamental griega no desataría automáticamente una quiebra de los principales bancos griegos", dijo la experta en un comunicado divulgado hoy.
Agregó que la consideración inmediata más relevante para la calificación que dé Fitch a los bancos consistirá en asegurar un mecanismo por el que el banco central nacional continúe suministrando liquidez a las entidades.
Las cinco instituciones bancarias más importantes (Banco Nacional de Grecia, EFG Euroban Ergasias, Alpha Bank, Piraeus Bank y Agricultural Bank of Greece (ATEbank), están calificados por Fitch como "B+/RWN", al nivel de bono basura, y mantenían en sus libros unos 45.000 millones de la deuda helénica a finales del primer trimestre de este año, apunta la agencia calificadora.
Fitch apunta que el monto final de las pérdidas sufridas como resultado de una teórica reestructuración de la deuda soberana griega para los bancos helénicos, dependería de las condiciones específicas de esa operación y de los modelos de valoración aplicados a la deuda en poder de las entidades.
Añadió que la liquidez de los bancos griegos ha sido restringida sustancialmente y que éstos dependen ahora en gran medida de la financiación del Banco Central Europeo (BCE), tras precisar que sus depósitos han decrecido desde el tercer trimestre de 2009 un 17 %, hasta los 197.000 millones de euros de finales de abril de este año.
Además, las garantías de la banca griega depositadas en el BCE han caído de manera sustancial como resultado del cambio de criterios introducido por la entidad emisora europea a comienzos de 2011.
Ante este panorama, Fitch advierte de que rebajará aún más su calificación, hasta "CCC", a los cinco institutos, a menos que exista un programa de recapitalización bendecido por las autoridades financieras europeas. EFE