Londres, 13 may (EFE).- La aerolínea británica British Airways
planea operar, al menos, la mitad de los vuelos programados en el
aeropuerto londinense de Heathrow durante el primer paro de cinco
días de la huelga convocada por su personal de cabina para mayo y
junio.
BA desveló hoy un plan de contingencia para afrontar los nuevos
paros laborales anunciados hace tres días por su tripulación de
cabina.
Unite, el sindicato que engloba a ese colectivo confirmó cuatro
paros de cinco días entre mayo y junio: del 18 al 22 de mayo, del 24
al 28 del mismo mes, del 30 de mayo al 3 de junio y del 5 al 9 de
junio.
Cara al próximo martes, cuando comenzará la primera tanda de la
huelga, British Airways informó hoy de que pretende operar más del
60 por ciento de sus vuelos de larga distancia y más del 50 por
ciento de los servicios cortos que partan desde ese aeropuerto.
Unite convocó la medida de 20 días de parón laboral en total
después de que los trabajadores rechazaran la última propuesta de la
aerolínea británica para tratar de terminar con un conflicto laboral
que los enfrenta desde hace 15 meses.
BA planea desplazar a más de 60.000 pasajeros durante cada uno de
los días de la primera tanda de la huelga.
La mayoría de los vuelos cortos programados en Heathrow serán
operados por personal y aviones de BA, aunque la compañía alquilará
ocho aviones con pilotos y tripulación de cabina de cinco aerolíneas
diferentes de Reino Unido y Europa.
La aerolínea también ha llegado a acuerdos con otras compañías
para acomodar a los viajeros afectados durante los paros.
El consejero delegado de BA, Willie Walsh, lamentó hoy que los
líderes sindicales hubieran escogido "de forma deliberada" convocar
la medida de fuerza en periodos vacacionales -el 31 de mayo es día
festivo en Reino Unido y la primera semana de junio es periodo de
vacaciones escolares- "para ocasionar las mayores alteraciones
posibles a las familias que tratan de marcharse".
"Mientras el nuevo Gobierno empieza a afrontar los enormes retos
económicos a los que se enfrenta el país, la prioridad de Unite es
buscar cómo dañar los vínculos que tiene Reino Unido con el
exterior", señaló Walsh.
El directivo insistió en que la compañía hizo una oferta "muy
justa" al sindicato para tratar de resolver el conflicto entre ambas
partes.
La pasada semana, un 81 por ciento de los trabajadores de BA votó
en contra de la última propuesta hecha por la dirección.
Ese rechazo se debió a que BA aún no ha devuelto a quienes
secundaron los paros de marzo sus beneficios viajeros y mantiene las
sanciones para 50 miembros sindicales. EFE