Fráncfort (Alemania), 12 nov (EFE).- El consejo de gobierno del
Banco Central Europeo espera una recuperación gradual de la economía
en la zona del euro en 2010, aunque reconoce que en el panorama
sigue habiendo incertidumbre.
En su boletín mensual de noviembre, publicado hoy, el BCE sostuvo
que los tipos de interés actuales son "apropiados".
La tasa rectora para las principales operaciones de
refinanciación en la eurozona están en el 1 por ciento, nivel
históricamente bajo con el que el BCE quiere impulsar la
recuperación económica.
Respecto a la inflación, el BCE destacó que, aunque la inflación
interanual medida por el Índice Armonizado de Precios al Consumo se
situó en el -0,1 por ciento en octubre, en los próximos meses
retomará valores positivos y se mantendrá en niveles positivos en el
horizonte temporal relevante para la política monetaria.
"Las expectativas de inflación a medio y largo plazo siguen
firmemente ancladas en niveles compatibles con el objetivo del
Consejo de Gobierno de mantener la inflación en tasas inferiores,
aunque próximas al 2 por ciento a medio plazo", escribe el BCE.
Los resultados del análisis monetario conforman la valoración de
que las presiones inflacionistas a medio plazo son "reducidas", dado
que los agregados monetarios y crediticios siguen ralentizándose.
En ese contexto, el BCE espera que la estabilidad de precios se
mantenga a medio plazo, lo que respaldará el poder adquisitivo de
los hogares de la zona del euro.
En cuanto al análisis económico, el BCE sostiene que los
indicadores apuntan a una mejora de la actividad económica en el
segundo semestre del año.
En particular, la zona del euro debería beneficiarse del ciclo de
existencias, de una recuperación de las exportaciones y de las
importantes medidas de estímulo macroeconómico que se están
aplicando y de las adoptadas para normalizar el funcionamiento del
sistema financiero.
El BCE no descarta por ello que las tasas de crecimiento
intertrimestrales del Producto Interior Bruto (PIB) recuperen
niveles positivos en la segunda mitad de este año.
No obstante, el grado de incertidumbre permanece elevado, ya que
determinados factores tienen un carácter temporal.
En opinión del BCE, los riesgos que acechan a la economía de la
zona del euro permanecen, en su conjunto, "equilibrados" y es
posible que los efectos de las medidas de estímulo sean mayores de
lo esperado.
Para los gobernadores del BCE eso significa que "la confianza
podría mejorar con mayor rapidez, que el deterioro de los mercados
de trabajo podría ser menos acusado de lo esperado anteriormente y
que la demanda externa podría ser superior a la prevista".
Respecto a los riesgos a la baja, el BCE recoge en su editorial
que persiste la preocupación de que la espiral de reacciones
adversas entre la economía real y el sector financiero asea más
intensa y duradera" y de que "se produzcan nuevos aumentos de los
precios del petróleo y de otras materias primas".
Completan esa relación una eventual intensificación de las
presiones proteccionistas y una corrección desordenada de los
desequilibrios mundiales.
Por lo que se refiera al análisis monetario, el BCE informó de
que las tasas de crecimiento interanual anual medido en el agregado
M3 y los préstamos al sector privado retrocedieron nuevamente en
septiembre al 1,8 y al -0,3 por ciento, respectivamente.
Esta desaceleración simultánea avala, según el BCE, la valoración
de que se ha producido una disminución del ritmo de la expansión
monetaria subyacente y de que las presiones inflacionistas a medio
plazo son moderadas.
El BCE considera "muy probable" que en los próximos meses, los
efectos de base asociados a la intensificación de las turbulencias
financieras de hace un año incidan a la baja sobre las tasas de
crecimiento interanuales de los agregados monetarios.
Además, la tasa de crecimiento interanual de los préstamos
bancarios al sector privado no financiero se tornó ligeramente
negativa en septiembre, mientras que el crecimiento interanual de
los préstamos a las sociedades no financieras como a los hogares
disminuyó nuevamente, con resultado negativo.
Al mismo tiempo, los flujos mensuales de préstamos a hogares se
mantuvieron positivos e incluso aumentaron, mientras que los
relativos a sociedades no financieras fueron negativos. EFE
cv/mdo