Dubái (EAU), 15 jun (EFE).- El Banco Mundial (BM) pidió hoy a los
gobiernos de Oriente Medio y del norte de África acortar las
diferencias entre las zonas ricas y pobres, sin recursos naturales,
con medidas como la expansión de la educación entre las mujeres.
El organismo hizo la petición en un informe presentado hoy en la
Facultad de Administración Gubernamental del emirato de Dubái con el
título "Entre la pobreza del lugar y la prosperidad de los pueblos:
¿Cómo la región de Oriente Medio y norte de África pueden superar
las disparidades espaciales?"
El documento insta a los Gobiernos de esas regiones a adoptar
políticas frente a los desafíos de desarrollo que vive la gente en
áreas pobres cuya geografía carece de recursos naturales.
En ese sentido, el principal autor del informe, el experto
económico del BM Alex Kremer, apuntó que la enseñanza femenina es
unas de las principales prioridades para el desarrollo de las zonas
más desfavorecidas.
Además, otras medidas como "asfaltar los caminos rurales podría
generar un gran efecto en la realidad, así como desarrollar lazos
fuertes y profundos entre las instituciones comerciales y públicas",
dijo Kremer en Dubái.
El informe apunta que las mayores disparidades en el nivel de
vida de los habitantes, especialmente, entre las zonas rurales y las
urbanas, ocurren en países como Marruecos, Egipto, Yemen y Siria.
Para eliminar esas diferencias, el BM sugiere igualdad de
oportunidades e inversión, que deben suponer la piedra angular de
cualquier respuesta en el plano político, y aumentar los vínculos
entre las zonas ricas y las pobres.
Además, propone que los gobiernos ayuden al desarrollo gradual de
las zonas más desfavorecidas, no con grandes obras de
infraestructuras, sino facilitando el trabajo de los actores locales
y coordinando sus iniciativas.
Por su parte, la vicepresidenta del BM para Asuntos de Oriente
Medio y el norte de África, Shamshad Akhtar, destacó que "el
objetivo de este estudio es ofrecer a los estrategas políticos un
marco para ayudar a los habitantes de zonas remotas con el fin de
que participen en la cosecha de las ventajas de desarrollo".
Akhtar subrayó que la actividad económica, centrada con solidez
en las principales ciudades para lograr la eficacia, no debe
condenar a los habitantes de los lugares pobres a un aislamiento y a
la exclusión de los beneficios de la prosperidad. EFE