Washington, 5 jun (EFE).- La empresa petrolera BP ha recuperado
unos 6.000 barriles de crudo desde que el viernes colocó una tapa,
con aberturas, sobre el pozo abierto en el fondo del Golfo de
México, informó hoy el comandante de la Guardia Costera de EE.UU.,
almirante Thad Allen.
El Servicio Geológico de Estados Unidos calcula que, desde la
explosión del 20 de abril que destruyó la plataforma de perforación
Deepwater Horizon, el crudo ha manado de ese hoyo a 1.500 metros de
profundidad a una tasa de unos 12.000 a 19.000 barriles diarios.
Algunos científicos calculan que el vertido está entre los 12.000
y los 25.000 barriles por día. El barril de petróleo tiene un
volumen de 159 litros.
El crudo seguía manando hoy por cuatro aberturas en la tapa de
contención, colocada ayer por BP, y los ingenieros de la empresa
cerrarán gradualmente esas ranuras durante el fin de semana
permitiendo un flujo mayor del petróleo hacia el buque Discoverer
Enterprise.
Allen, en una conferencia de prensa, dijo que "las ranuras
seguirán abiertas hasta que pueda estabilizarse la presión y la tasa
de extracción" en el buque de superficie.
Una prioridad es impedir que el agua penetre en la tapa de
contención y obstruya la tubería de elevación que dirige el torrente
de petróleo hacia la superficie.
El agua del mar se mezcla con el petróleo y el gas formando
hidratos debido a las temperaturas muy bajas y la alta presión en
esa profundidad del mar.
La formación de hidratos causó el fracaso de un primer intento de
BP por capturar el crudo hace cuatro semanas cuando se probó la
colocación de cúpula de contención.
Un factor que limita el ritmo de cierre de las aberturas y un
encaminamiento más rápido de todo el crudo hacia la tubería es que
el Discoverer Enterprise tiene una capacidad de procesamiento de
unos 15.000 barriles diarios.
Allen invitó, asimismo, a los propietarios de embarcaciones en la
costa del Golfo, desde Louisiana a Florida, para que se registren
con el Gobierno en una movilización ciudadana para contener la
contaminación y limpiar las playas, pantanos y otras áreas costeras.
El comandante de la Guardia Costera señaló que se ha puesto en
marcha otro programa para la capacitación de unos 4.000 civiles en
las labores de limpieza, y que ésta es una oportunidad para personas
que están sin empleo en la región.
La contaminación de las aguas con el crudo que mana del pozo,
ubicado unos 80 kilómetros al sureste del Delta del Mississippi, ha
llegado a las costas de Louisiana, Mississippi, Alabama y se mueve
hacia Florida.
El presidente Barack Obama prometió hoy toda la ayuda del
Gobierno a las regiones afectadas por el derrame de petróleo que
comenzó el mes antepasado tras el accidente en el cual murieron 11
trabajadores.
En su discurso radiofónico de los sábados, Obama reiteró su
promesa de que BP tendrá que pagar "hasta el último centavo" por los
daños sufridos por los residentes de la región.
"Esta gente trabaja mucho. Cumple su responsabilidad. Ahora,
debido a una catástrofe causada por el hombre, de la cual no tiene
culpa y está fuera de su control, sus vidas han sido lanzadas al
caos. Esto es brutalmente injusto", señaló.
Obama, que grabó el discurso el viernes en Grand Isle en el
estado de Luisiana, que junto a los de Mississippi y Alabama ha sido
el más perjudicado por el vertido, indicó: "Como dije desde el
principio de este desastre, voy a estar junto al pueblo de la costa
del Golfo hasta que se recupere".
Ante la situación causada por el derrame, el Gobierno federal ha
movilizado en la región 17.500 efectivos de la Guardia Nacional y
más de 20.000 personas participan en las tareas para proteger el
litoral de la marea negra.
Obama señaló que en la región del Golfo hay más de 1.900 navíos
que están participando en las operaciones en "la mayor respuesta a
un desastre ambiental de este tipo en la historia de nuestro país".
EFE